Agencia DPA
Brasilia, 26 de noviembre 2014. – El gobierno brasileño dará a conocer el lunes próximo los resultados de la investigación para definir si el presidente Joao Goulart, derrocado en 1964 por el golpe militar que instaló una dictadura de 21 años, fue asesinado, anunciaron hoy fuentes oficiales.
Según la jefa de la Secretaría de Derechos Humanos de la Presidencia, Ideli Salvatti, ya han sido finalizados los tres informes forenses sobre los análisis de los restos mortales de Goulart, realizados por expertos de Brasil y del exterior.
Las conclusiones serán divulgadas en un documento que será entregado el lunes a la familia de Goulart y que después será dado a conocer a la prensa.
Los restos mortales de Goulart, fallecido en diciembre de 1976 en su exilio en Argentina, oficialmente a raíz de un infarto, fueron exhumados el 12 de noviembre del año pasado en su ciudad natal, Sao Borja, en el estado de Río Grande do Sul.
Familiares de Goulart sospechan que el ex presidente fue envenenado por agentes de la dictadura, en el marco de la llamada Operación Cóndor, una alianza creada en la década del 70 entre los gobiernos del cono sur para perseguir a los opositores de los regímenes autoritarios que gobernaban entonces los países de la región.
Los análisis de los restos mortales fueron realizados por tres laboratorios: el brasileño TASQA, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Portugal y el Servicio Externo de Ciencias y Técnicas Forenses de España.
“A partir de hoy todos los expertos, los de la policía federal (brasileña) y los de los dos laboratorios internacionales, así como expertos de otros países (argentinos, uruguayos, portugueses, españoles, cubanos) compararán los informes de los tres laboratorios y en base a esto elaborarán un informe final”, expresó hoy Salvatti.
La ministra afirmó que, sean cuales fueren los resultados, “lo importante es que todo este trabajo ha sido realizado con absoluta transparencia, con las técnicas más avanzadas, para presentar el informe más fiel”.
“No estamos exhumando solamente a un presidente de la República, sino un período de la historia brasileña que debe ser rescatado”, agregó.
La exhumación de los restos mortales de Goulart fue ordenada por la Comisión de la Verdad, que investiga los crímenes del régimen dictatorial y que presentará sus conclusiones en diciembre.
La sospecha de que hubiese sido asesinado fue manifestada hace varios años por sus familiares, y se afianzó después de que el ex agente uruguayo Mario Neira Barreto -detenido desde 2003 en Brasil por asalto a un banco y tráfico de armas- asegurara que participó en la colocación de una pastilla con potasio y cloruro deshidratado en uno de los medicamentos que ingería diariamente el ex mandatario para tratar sus problemas cardíacos.
La viuda de Goulart, María Thereza, aseguró sin embargo que no cree en la hipótesis de asesinato, y que sigue convencida de que su esposo falleció a raíz de problemas cardíacos cuando dormía en la casa de Argentina donde vivía exiliado.
“Él padecía de problemas cardíacos desde hace mucho… Nunca pensé en envenenamiento”, dijo en una entrevista al diario brasileño “Zero Hora”.
Pero la Comisión de la Verdad, que investigó el caso, detectó “indicios concluyentes” de que Goulart fue vigilado en el exilio por la llamada Operación Cóndor, de cooperación entre los regímenes autoritarios de Argentina, Brasil y Uruguay, y consideró que por esta razón la hipótesis de asesinato no puede ser descartada.