Agencias

 

16-11-14.- En un hecho inédito en Brasil, la Policía Federal brasileña detuvo este viernes a presidentes y otros ejecutivos de grandes empresas del sector de obras – las llamadas ‘empreiteiras’ – acusadas de negocios dudosos con Petrobras.

 

Por orden de la Justicia brasileña, la Policía Federal (PF) emitió el mandado de prisión para 85 personas en cinco estados brasileños, además de Brasilia, que es el Distrito Federal. Hoy viernes fueron apresadas 18 personas – un exdirector de Petrobras, presidentes y otros ejecutivos de las constructoras OAS, Queiroz Galvão, UTC, Camargo Correa e Galvão Engenharia.

Otras empresas igualmente grandes del sector en Brasil, como Mendes Júnior, también son investigadas. La operación policial es parte de la investigación sobre el uso de recursos de Petrobras para el sector político. En la práctica se investiga el desvío de dinero de la principal empresa de Brasil para partidos políticos y sus ramificaciones para financiamiento de campañas políticas.

En Brasil los gastos en campañas son siderales  y se estima que cada candidato gastó cifras altísimas en las disputas electorales. El escándalo, que empezo a ser investigado hace ocho meses, es llamado de ‘Operación Lava-Jato’ porque involucra el lavado de dinero.

Esta séptima etapa de los trabajos realizados por la Policía Federal fue llamada de ‘juicio final’. Abarca principalmente a las constructoras brasileñas – empresas poderosas y en muchos casos influentes hace décadas junto al poder público brasileño – pero no ahorra nombres de políticos del gobierno brasileño.

De acuerdo con la PF, las siete empresas del sector de construcción investigadas tendrían contratos de casi R$ 60 mil millones con Petrobras.