Nicolás Lantos- Agencias
Página12
19-07-14.- La presidenta Cristina Fernández de Kirchner lo definió como “un día fundacional en la relación entre” la Argentina y China, que ahora entran en una etapa de “asociación integral”, tras su encuentro con el mandatario de ese país Xi Jinping que tuvo lugar ayer en la Casa Rosada, y donde se suscribieron veinte acuerdos bilaterales que prevén inversiones por más de siete mil quinientos millones de dólares.
Las inversiones chinas permitirán la construcción de dos represas hidroeléctricas en la provincia de Santa Cruz, la recuperación del ramal ferroviario Belgrano Cargas, un swap de monedas por 11.000 millones de dólares que fortalecerá las reservas argentinas (ver página 5) y el emprendimiento de una cuarta central de energía nuclear. Además de los entendimientos en materia comercial, financiera, científica y cultural, el jefe de Estado chino manifestó su respaldo a la reestructuración de la deuda argentina, en pleno conflicto por este tema con los fondos buitre.
La Presidenta recibió alrededor de las cinco de la tarde, en la Casa de Gobierno, a Xi Jinping, quien llegó a Buenos Aires acompañado por una numerosa comitiva de funcionarios y más de 200 empresarios, que durante el fin de semana mantendrán encuentros con sus colegas argentinos para profundizar la cooperación. La Presidenta, por su parte, estuvo escoltada por su gabinete en pleno, y muchos de sus ministros, como Axel Kicillof (Economía), Julio De Vido (Infraestructura) y Carlos Casamiquela (Agricultura) participaron de la firma de los diversos acuerdos.
Al exponer ante los medios en la sala de conferencias de la Casa de Gobierno, en una declaración conjunta con Xi Jinping, Fernández de Kirchner destacó que tras una “primera etapa de asociación” entre las dos naciones, esta visita del mandatario chino da comienzo “al establecimiento de una asociación estratégica integral” Argentina-China. “Esto significa una jerarquización, la cualificación de la relación económica, política y cultural, que va más allá de la bilateralidad. Podemos hablar de las posiciones comunes que hemos tenido, China ha apoyado siempre la causa de Malvinas, como nosotros la idea de una sola China”, destacó CFK.
“La relación entre China y Argentina pasa a ser una verdadera política de Estado. Ya no es de un gobierno sino de un Estado. Que asume que hay un nuevo marco de las relaciones internacionales afortunadamente y la aparición de nuevos actores es provechosa para todos”, manifestó la mandataria. “Esta nueva situación internacional con la presencia de nuevos actores está ayudando a reacomodar las cosas y a que países emergentes, como los que nos reunimos en Brasilia, podamos tener nuevas y mejores oportunidades”, agregó, en referencia a la cumbre entre las potencias emergentes del Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y los sudamericanos nucleados en Unasur.
“Sabemos que el mundo donde unos dominen a otros, y vivan a expensas de otros, no va a ser posible más”, sostuvo la Presidenta, para quien “el nuevo mundo es un mundo en el que la cooperación y el win-to-win deben ser los ejes de un nuevo modelo global.” En ese sentido, la mandataria explicó cómo las obras que financiará china son “fundamentales para dar competitividad y abaratar costos” de productos argentinos que son muy requeridos por el creciente mercado del país asiático. El objetivo de Argentina, agregó, es “no sólo llegar con productos primarios sino también con valor agregado, para acomodar la balanza comercial que creció 10 veces pero es deficitaria”.
Por su parte, Jinping sostuvo ante la prensa que “la patria china comprende y apoya a la Argentina en materia de su reestructuración de deuda y espera que se logre una solución adecuada” en el conflicto con los fondos buitre, y agregó que ambos países “van a tomarse el uno al otro como una importante oportunidad de desarrollo y socio de desarrollo”. Respecto de los acuerdos firmados, destacó la financiación de las represas y del Belgrano Cargas como “casos ejemplares para la cooperación de mutuo beneficio entre China y Argentina e, incluso, entre China y América latina y el Caribe”.
Pusieron el gancho
Con ocasión de la visita de Xi Jinping, se firmaron una veintena de acuerdos bilaterales que abarcan aspectos económicos, científicos, tecnológicos, comerciales, financieros y culturales, que prevén inversiones chinas hacia la Argentina por más de siete mil quinientos millones de dólares, un intercambio de monedas equivalente a otros once mil millones y la apertura de los mercados del gigante asiático a varios productos de exportación de origen nacional. El más importante de ellos es el que refiere al financiamiento de la construcción de las represas hidroeléctricas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic, en la provincia de Santa Cruz, y a la recuperación del ramal ferroviario Belgrano Cargas.
La firma de los veinte documentos tuvo lugar ayer por la tarde en el Salón de las Mujeres del Bicentenario de la Casa Rosada y participaron ambos mandatarios, además de ministros y secretarios de Estado de las áreas afectadas y empresarios. La sala estaba repleta por la numerosa comitiva china (llegaron junto a Jinping unos doscientos hombres de negocios, casi noventa periodistas, además de miembros del gabinete y funcionarios de segunda y tercera línea). Además, hubo videoconferencias con las ciudades de Maciel (provincia de Santa Fe), de la que participó el secretario de Transporte, Alejandro Olmos, y El Calafate (Santa Cruz), con la presencia del gobernador Daniel Peralta.
“Hemos firmado hoy algo más que un convenio: el sueño de muchas generaciones de santacruceños”, celebró Fernández de Kirchner al anunciar el acuerdo para financiar las dos represas hidroeléctricas en esa provincia, que contemplan el “aprovechamiento hidroeléctrico de uno de los ríos más caudalosos de la Argentina, el Santa Cruz, que nace en los hielos continentales”. Tras agradecer al presidente chino por las gestiones, CFK recordó que el tema había sido conversado hace un año, en la última cumbre del G-20, en San Petersburgo, donde ambos mantuvieron su primer encuentro bilateral y acordaron la actual visita de Xi Jinping a Buenos Aires y un futuro viaje de la mandataria argentina a Beijing, el año que viene.
El acuerdo de financiamiento de las represas Kirchner y Cepernic es por 4714 millones de dólares y es el más importante de los que se suscribieron ayer, seguido por el préstamo de 2099 millones de dólares para la compra de locomotoras, vagones de carga y vías para revitalizar el ramal Belgrano Cargas de ferrocarriles. El interés chino en este medio de transporte pasa por el abaratamiento en el precio de los fletes de la materia prima que exporta Argentina a ese país, principalmente soja.
Otros acuerdos ratificados ayer implican créditos para la compra de 11 barcos, por 423 millones de dólares; la provisión y puesta en marcha de una red de acceso multiservicio; un entendimiento de cooperación en materia de energía nuclear que implica cooperación tecnológica y financiamiento chino para la construcción de la cuarta central de generación nucleoeléctrica argentina; un acuerdo de cooperación entre la empresa estatal YPF y el Banco de Desarrollo de China, para actividades de inversión y comercio en la industria de hidrocarburos.
También se firmó una carta compromiso con la provincia de Entre Ríos para desarrollar un proyecto de riego en ese distrito y un memorándum de entendimiento entre el Ministerio de Comercio y el Banco Central por el cual se estableció un mecanismo de cooperación en materia de estadística e inversión directa. En materia económica también se destaca el acuerdo bilateral de pase de monedas o swap por 11.000 millones de dólares para fortalecer el nivel de reservas de la Argentina.
Por último, ambos presidentes acordaron también un memorándum sobre cooperación y construcción del reactor de agua pesada en Argentina y, además, una convenio marco de cooperación en materia económica e inversiones. Asimismo, se firmó un convenio sobre aporte de infraestructura e inversión industrial entre ambos gobiernos; también en materia de veterinaria y sanitaria, de modo de fortalecer los intercambios; acuerdos de exportación de frutas y carnes argentinas a China y un memo de entendimiento para el establecimiento de centros culturales en Beijing y Buenos Aires.