Luis Britto García
1
Mi compañero de liceo Noel Pantoja estuvo preso en la Seguridad Nacional, y me contaba que lo peor era cuando les leían una lista con los destinados al campo de concentración de Guasina. Caían nombres como martillazos, hasta el alivio de haber sido perdonado por horas o por días. Una lista no puede constar de un solo término. La unidad arrastra compañía, y de ella surgen el orden de sucesión y la cantidad.
2
Maximiliano Robespierre defendía a la Revolución Francesa contra la reacción interna y las monarquías externas sin más arma que su oratoria fulgurante y su reputación de incorruptible. A la voz de “el terror sin virtud es desastroso, la virtud sin terror es impotente”, amenazó con dar a conocer una lista de traidores. El retorcido Fouché difundió en la Convención la falacia de que la mayoría de los convencionistas figuraban en el prontuario. A la mañana siguiente la Convención condenó a Robespierre a la guillotina, de la cual no lo salvó ni su intento de suicidarse con un pistoletazo. Cuando una lista comprende a la mayoría, debe esconderse quien la redacta.
3
Piñerúa Ordaz, accióndemocratista repitiente en la Universidad de la Vida, forzó sus candidaturas para diputado y hasta para Presidente amenazando con revelar una retahíla de copartidarios corruptos. Así llegó a candidato derrotado en 1978, a parlamentario perpetuo y a olvidado, salvo por la amarillenta lista que nunca enseñó. No hay peor lista que la que se queda en amenaza.
4
Renée Hartman, luchadora prisionera de la inhumana dictadura de Pérez Jiménez y posteriormente esposa del presidente Rómulo Betancourt, fallecido éste amagó con revelar un heredado repertorio de compañeritos peculadores, que quedó en el misterio. No hay peor lista que la que no se redacta.
5
Durante los meses anteriores al 18 de febrero de 1983 (Viernes Negro) la oligarquía venezolana exportó las divisas del país hasta dejar el Tesoro como un hueso pelado. Sólo Últimas Noticias publicó el elenco de alegres fugadores de capitales, arzobispos, eminencias, banqueros. No hay lista más inútil que la que todos conocen.
6
El comisario Fermín Mármol León en su libro Cuatro crímenes, cuatro poderes (1978), presentó la cadena de pruebas que irrefutablemente incriminaban de delitos horrendos a un sacerdote, un oficial, un político y un rico heredero, y la forma en que los tribunales los eximieron. No hay lista más desalentadora que la de los impunes.
7
Del fraude a la Nación conocido como Régimen de Cambio Diferencial (1983-1989) quedaron varias requisitorias, escritas en papel de mala calidad, pues se fue disolviendo hasta que apenas quedó el nombre de un infeliz asiático preso, “El Chinito de Recadi”. Lo que se evaporó también para siempre fue la hegemonía del partido que escribió las listas para destruirlas.
8
A Hugo Chávez Frías lo secuestran, lo sacan a empellones de Palacio, lo encierran en una isla quizá para ejecutarlo. Repuesto en Miraflores por el pueblo, misericordiosamente rasga la lista de golpistas y crucifijo en mano los invita por televisión a que reflexionen. A los siete meses ya tratan de nuevo de derrocarlo con un cierre patronal y un sabotaje petrolero que cuesta más de 15.000 millones de dólares. No hay peor lista que la que no se aplica.
9
La mañana tras el golpe de abril de 2002 los anclas de las televisoras exigían: “si usted conoce a algún chavista, denúncielo”, y en un muro cerca del aeropuerto de La Carlota comenzó a crecer una larga lista de nombres, con cruces. En alguna gaveta los guardan, y cada día añaden varios. Quien no usa para nada su lista, termina en la de otro.
10
Se antoja la oposición de convocar en 2004 un referendo revocatorio que resulta confirmatorio; el electorado decide por paliza que Chávez siga en el poder, y el accióndemocratista Ramos Allup anuncia que mostrará la compilación de pruebas del fraude el día siguiente. Es el día más largo de la Historia, porque todavía no la ha presentado. No hay lista más nefasta que la que no se presenta.
11
La oposición compila una nómina de firmantes del referendo revocatorio para negarle puestos de trabajo a quienes no la suscribieron, y luego acusa al gobierno de no conferir cargos públicos a los suscriptores. Nadie sabe para quien listea.
12
Descubre el empresariado que mejor que producir es obtener divisas a tasa preferencial mintiendo que las aplicará a importaciones indispensables, no importar nada y revender los dólares diez o doce veces más caros. Así se esfuman según la expresidente del Banco Central de Venezuela Edmée Betancourt 20.000 millones de dólares y según el Presidente unos 60.000 millones. Funcionarios comprensivos adjudicaron estas divisas para importaciones fantasmas a compañías de maletín e incluso empresas públicas, alentando al empresariado a una guerra económica con escasez planificada y desabastecimiento estratégico. La Fiscal General de la República informa que hay 1.490 investigaciones abiertas por tal motivo. No hay lista más peligrosa que la que todos esperan y no aparece.
13
Quien oculta una lista la encabeza.