Pablo Heraklio

La Tarcoteca contrainfo

 

La corporación Glaxo Smith Kline está entre la espada y la pared. La compañía farmacéutica británica está cosechando denuncias de corrupción por todo el mundo, sin descanso y las consecuencias se reflejan en los resultados financieros. ilfattoquotidiano 26 de abril 2014

 
Case farmaceutiche e corruzione: lo scandalo planetario della Glaxo Smith KlineQué es GSK

La corporación GSK es una de las llamadas Big Pharma, un peso pesado en la producción de medicamentos como Augmentine, Seretide, Zantac o Zovirax. Es un referente en el estudio biológico, con miles de científicos en plantilla y publicaciones cada cuatro días en la revista Science.

Últimos éxitos

Líbano y Jordania abril 2014, mercado negro de droga
Las últimas vienen del Líbano y Jordania. El 16 de abril, el Wall Street Journal (vía TheGuardian) escribe al respecto que estuvo en posesión de un correo electrónico de personal de la compañía en el que se indica que habría sobornado a médicos locales con los viajes y muestras de medicamentos gratis que podrían haber vendido directamente a los pacientes, medicamentos en negro. 200 personas son acusadas. La empresa se defiende diciendo que la corporación es infinitamente más grande y que estos son hechos aislados.

Irak abril 2014, infiltrados en el ministerio
El 6 de abril un chivato informada sobre los asuntos turbios de GSK en Medio Oriente, revela al Wall Street Journal (vía thetelegraph)que en Irak la empresa alistó secretamente como representes de venta a 16 médicos y farmacéuticos que trabajaban para el propio gobierno. También se hablaba de pago de gastos de viaje a las conferencias internacionales, además de ofrecer sobornos sustanciales a los médicos que recetaban sus productos. Como era de esperar, la GSK gana un contrato con el Ministerio de Salud Irakí con el suministro de la vacuna Rotarix contra la gastroenteritis y funcionarios del ministerio con sus familias si se van de vacaciones en el Líbano con los gasto pagos por la empresa.

 

China 2013, objetivos de producción
En julio de 2013, el escándalo estalló en China. Aquí la multinacional británica se gasta 320 millones de libras, unos 480 millones dólares en comprar a la clase médica con dinero, viajes y favores sexuales. 

Uno de sus cuatro directivos detenidos en julio, su directora de desarrollo de negocios, Huang Hong, reconoció a la policía que la central de GSK en el Reino Unido les había fijado ritmos de crecimiento anual de las ventas de hasta un 25 por ciento, entre 7 y 8 puntos porcentuales por encima de la media del sector en China. Para conseguir estos resultados la empresa vinculaba los salarios al volumen de ventas de cada empleado, de manera que quien no cumpliera con los objetivos pudiera perder miles de yuanes al mes. eleconomista

Polonia 2010-2012, prescripción de genéricos y programas de formación 
Una investigación realizada por el programa Panorama de la BBC revelaba que en Polonia el gerente regional de Glaxo Smith Kline y 11 médicos se encuentran bajo investigación por un presunto pago de sobornos en que los batas blanca daban el cambiazo con la prescripción del medicamento para el asma Seretide. 

El incidente tuvo lugar hace cuatro años y la denuncia es contra un ex representante de la empresa, Jarek Wisniewiski. Justo en ese período (2010-2012) el coloso farmacéutico británico decía estar comprometido en un programa de formación sobre el asma. Pero Wisniewiski lo desmiente: el dinero del programa se utilizó realmente para pagar a médicos complacientes que aseguraban aumentar las prescripciones de medicación. En declaraciones a la BBC el ex empleado se expresa contundente: «En la reunión les dije que pagué por el curso y que necesitaba más recetas de Seretide. Entonces se dieron cuenta exactamente de por qué estaba pagando».

Otro ex representante de GSK que prefiere mantener el anonimato, dijo que por un lado la empresa remunera con el dinero a los médicos para acudir a conferencias y cursos inexistente y por otra parte los médicos aumentar las ventas del fármaco. Un quid pro quo sin rodeos. Wisniewiski confirma: «cien libras debían producir un centenar de nuevas recetas del producto». Añade que no se comportaba así por su propia voluntad: la orden de emplear juego sucio venían impartidas por el gerente regional. De hecho según el le incomodaba la situación y así se lo hizo saber a los jefes regionales de la compañía que amenazaron con despedir o marginar. La GSK admite haber tomado represalias y castigado a su empleado en 2011. En un informe publicado en el sitio web Estados de las Multinacionales se mostraba que sólo en 2013 se cometieron 161 violaciónes de normativa por parte del personal en los departamentos de Marketing político y de Ventas y 113 denuncias. El resultado fue que 48 personas han sido despedidas o dejaron sus puestos de trabajo de forma voluntaria.

Estados Unidos 2012, sobreprescripción y estudios falsos
El récord está en los Estados Unidos: en 2012, la compañía paga 3.000 millones de dólares en multas por sobornar a los médicos a cambio de la prescripción de antidepresivos por medio de  indicaciones no autorizadas.
 

Además, de lo mencionado, GSK también se declaró culpable de no tener en cuenta estudios que demuestran la ineficacia de algunos de sus fármacos.
El fraude concierne en especial a tres productos. Uno de ellos es el Paxil, el cual GlaxoSmithKline “comercializó” falsamente como un antidepresivo para niños, cuando nunca había sido aprobado como tal por las autoridades sanitarias.
Otro es el Avandia, un antidiabético vendido sin alertar sobre el riesgo de ciertos efectos secundarios.
Y el tercero es el Wellbutrin, un fármaco para tratar la depresión severa que GSKpublicitó como una solución para “estar más delgado o tener más relaciones sexuales”, dijo Carmen Ortiz, fiscal de Massachusetts. peru21
 

Estrategia
Con los medios de comunicación de su parte la estrategia de GSK ante las acusaciones es fingir que son hechos fortuitos, aislar y desentenderse de los implicados, minimizando el problema y sobretodo alejar las sospechas de la central localizada en Londres.

Para esto hace unos días la corporación envía nuevos gerentes a comprobar que las ventas se realizan de una manera limpia tratando de salvar su reputación, como si la práctica mafiosa dependiese únicamente por representantes individuales y no de órdenes globales provenientes de la cúpula de la organización.

 

En diciembre 2013, Andrew Witty , CEO de GSK, fue entrevistado por el New York Times repite una vez más que su compañía promete ahora obrar de la buena voluntad y no dar más dinero debajo de la mesa a los médicos. Pero el daño ya está hecho y nadie nos puede asegurar que no se repitan.

Las corporaciones solo ven números donde nosotros vemos personas. Si su ideal humano es una persona medicada habría que replantearse cuál es su ideal humano.