Mario Arveláez Rengifo
Innumerables escritores se han dedicado a realizar ensayos, libros e interpretaciones de escritos, de Simón José Antonio de la Santísima Trinidad, mejor conocido en la historia como Simón Bolívar, el Libertador. Pretender escribir algo original es una ardua tarea, no lo pretendo.
Simón Bolívar es uno de esos hombres que en algunos momentos parecen estar ubicados entre la realidad y la leyenda entre el mito y la verdad. Un crematístico.
La actuación de nuestro Libertador se evidencia desde el punto de vista práctico en sus actuaciones públicas, a pesar de sus propias contradicciones a tales consideraciones, se puede enmarcar por haber sido un gran político, un diplomático, un estadista, un militar y una idea: la de independencia, la de igualdad, la de libertad, la de justicia social y de antiimperialismo y así como de una patria grande la Gran Colombia.
Es así como en lo político, como gobernante, luchó por los verdaderos derechos humanos, dijo: “Yo imploro la confirmación de la libertad absoluta de los esclavos como imploraría mi vida y la vida de la Republica” a los indios, llamados por el “naturales” ordeno que se les devolviera como propietarios legítimos, todas las tierras que formaban los resguardos, sin importar el titulo que aleguen tener los actuales tenedores.
Por la elevación cultural de las masas empobrecidas de América su apoyo fue eficaz y de ejecución inmediata “El primer deber del Gobierno es dar educación al Pueblo”.
Exhortó a los combatientes por la independencia a luchar contra las diferencias de clase y contra la discriminación racial: “¡Soldados! Vosotros lo sabéis. La igualdad, la libertad y la independencia son nuestra divisa. He ahí el Ideal Bolivariano.
Se preguntaba: ¿“Nuestras armas no han roto las cadenas de los esclavos? ¿La odiosa diferencia de clases y colores no ha sido abolida para siempre?”
Cuan pocos, hasta hoy en América y el Caribe han dado continuidad histórica y desarrollado estas ideas bolivarianas.
Con razón dijo José Martí: “Lo que Bolívar no hizo, está todavía por hacer en América”
En lo diplomático como se demuestra en el manejo de las negociaciones del Tratado de Armisticio y el de Regularización de la Guerra con Morillo y La Torre, con el Capitán General del Perú y con acierto el asunto delicado de la autonomía del Alto Perú, hoy Bolivia y además de la concepción y desarrollo del Congreso de Panamá.
Ante su declaración de no tener nada de economista y menos de letrado, conocidos como abogados hoy, su actuación frente a la Hacienda Pública contradice sus opiniones, por las medidas que adopto para el desarrollo de los países liberados por él:
“Las minas de cualquier clase corresponden a la Republica” el propietario del suelo no lo es del subsuelo, hoy constituye la base fundamental de la riqueza venezolana el petróleo y demás minerales cuya explotación ha servido en tiempos de revolución como pilar fundamental para la justicia social y bienestar del pueblo venezolano.
Crea las corporaciones de “Amigos de la Agricultura” para estimular la siembra e incrementar la producción agrícola y luego las Juntas Provinciales de Agricultura y Comercio” a las cuales les señala como meta procurar el aumento de la siembra y mejora de la cría, ordena la entrega de libros para mejorar los conocimientos científicos de estas áreas.
En materia ambiental, prevé la preservación de las aguas, su uso racional, la conservación de los bosques y su uso racional.
Combate la burocracia, mediante la disminución de personal innecesario, implanta controles para acabar con la especulación y el acaparamiento y así como la garantía de los créditos internacionales.
Contra la corrupción decreto la pena de muerte para aquellos funcionarios incursos en la dilapidación de los fondos de la Republica
Se sometió al servicio militar porque “era necesario Vencer o Morir” la independencia no podía ser conquistada sino en el campo de batalla,
Este hombre, Padre Simón Bolívar se hizo en esencia, en idea, se concretó en nosotros en una idea a desarrollar, fue el hombre con las características humanas del tiempo histórico para ser el mensajero que del viejo continente Europeo, que cruzara el atlántico con sus vicisitudes y calamidades, para traer consigo en la mochila las ideas de la ilustración, de la Revolución Francesa e industrial con los lemas de: Fraternidad, Igualdad, Libertad y Justicia Social.
Estas ideas consiguen un terreno abonado en estas tierras de América para evolucionar, a las cuales la aristocracia y las clases sociales dominantes en las colonias españolas les tenían terror, nunca iban a permitir y hacer todo lo posible para que no llegaran a estas tierras. Éstas les montaron un cerco ideológico e intelectual en lo político.
En lo económico también, a través de un estricto monopolio comercial propiciado por la península, por ser estos los elementos principales que pudiesen servir de medios de divulgación de esas ideas progresistas y revolucionarias: imaginemos la idea, aquella que no justificaba la existencia de la esclavitud, tanto en cuanto los Derechos del Hombre y del Ciudadano: la idea: «Los hombres nacen y permanecen libres e iguales en derechos»; sin dueños. Por cuanto esta iba en contra de los intereses de las elites coloniales, no les brindaba beneficios.
Con la idea de la igualdad, descubrimos las desigualdades, con la idea de la independencia descubrimos la dependencia y el dominio imperial, con la libertad descubrimos la tiranía, el dominio y la esclavitud y con la idea de la justicia social descubrimos el socialismo.
Simón Bolívar, no culminó la lucha revolucionaria por el iniciada, emancipó a seis colonias españolas y las instituyo como Patrias libres para hombres libres, sacándolos de la condición subordinada a la cual las tenia sometidas el imperio español, políticamente pasivos y anulados.
Decía Bolívar: los americanos, “no ocupan otro lugar en la sociedad que el de siervos propios para el trabajo, y cuando mas, el de simples consumidores” las colonias quedaban destinadas a la producción de aquellas materias primas que interesaban a la Metrópoli. Hoy día situación que no ha cambiado mucho, solo ha cambiado de ubicación no está al Este, sino al Norte: la idea: “los hombres nacen todos con derechos iguales a los bienes de la sociedad”
Bolívar se convenció que en revolución es necesario desencadenar las más primitivas y violentas energías populares y encauzarlas hacia los objetivos de la justicia sociales que persiguen las revoluciones.
El 17 de diciembre de 1830, el doctor Reverend, sentado a la cabecera de la cama, observa la detención del pulso, la respiración suavemente estertorosa. Sale de la habitación e inmediatamente anuncia: «Señores, si queréis presenciar los últimos momentos postrer aliento del Libertador, ya es tiempo».
Era la una y siete minutos de la tarde, desaparecía el personaje que recogió sobre si el momento glorioso de la emancipación de Americana. El Sol de América y de la Humanidad.