Adelso Palmar Mestre
Aporrea
Debe señalarse, esta situación de desamor que impera actualmente viene favorecida también por el desarrollo tecnológico al que nos hemos visto enfrentados. Los adelantos tecnológicos nos han ido aislando cada vez más, nos han ido reduciendo el espacio a un “yo” rodeado de cosas que podemos utilizar a nuestro antojo. Antes para conseguir lo que queríamos teníamos que relacionarnos con otras personas, ahora con apretar un simple botón o hacer una llamada telefónica ya tienes lo que quieres.
Si bien es cierto, eso es lo que creemos que podemos hacer con las demás personas, que nosotros mismos ni siquiera consideramos como personas, creemos que podemos utilizarlas para nuestro beneficio como utilizamos las máquinas que tan útilmente nos han servido hasta ahora.
Es por ello, las relaciones con los demás no solo se han reducido sino que también se han enfriado, el mundo en que vivimos ahora es un mundo en el que impera el materialismo, un mundo en el que se han creado unos ideales de paz, equidad, inclusión y justicia que no somos capaces de llevar a cabo porque nos estamos volviendo fríos y faltos de sentimiento nos estamos dejando llevar por el desamor.
Sin embargo, nos hemos aislado de tal manera que pensamos que solo nosotros existimos y nos refugiamos en el anonimato. Este anonimato existencial es el que nos ha reducido a un número, a una cifra, ya ni siquiera somos nombrados, nuestra identidad se ha perdido de tal manera que ya no importamos a nadie.
Pero, quizás este planteamiento sea algo exagerado, es verdad que el desamor está extendido y que invade los corazones de muchos, pero también hay que decir que el amor es una característica propia del ser humano, el amor forma parte del hombre y la mujer, y por ello todo hombre y mujer, tiende a amar y ser amado, distinguiendo entre distintos tipos de amor. Todos los hombres y mujeres en el interior tendemos a tener ese sentimiento llamado amor; todos tendemos a tener amigos, es decir a cultivar la amistad; a enamorarnos, es decir al enamoramiento; y el amor resulta para nosotros, la mayoría de las veces, el camino para la felicidad que todo hombre y mujer, busca como meta en la vida.
Así mismo, puede parecer difícil afirmar que el amor forma parte de todo hombre y mujer, debido a la crueldad que suele caracterizarle a éste y también debido a la maldad del mundo en que vivimos, pero habría que afirmarlo porque; sin el hombre y la mujer ¿para qué tendría que existir el amor?. El amor por tanto existe porque existe el hombre y la mujer, y es, al fin y al cabo, una característica de éste. Vale decir, la gran cantidad de divorcios que ocurren a diario en nuestra sociedad, son por desamor y materialismo. Por esta razón, todos los venezolanos y venezolanas debemos darnos las manos con amor y dejar la ira, con bondad y amistad, pues es el progreso de todos nosotros.
Consideramos, el amor sería el concepto más amplio, no solo existe el amor entre dos personas o hacia una persona, como pasaría con el enamoramiento, sino que el amor va mas allá. El amor sería esa inclinación libre hacia algo o alguien que nos atrae por su belleza y bondad. Y jamás olvidemos, que el amor es eterno mientras dura; que lo más seguro del amor que es inseguro. Sabemos cuando empieza, pero no cuando se acaba.El amor empieza con una sonrisa, crece con un beso y finaliza con una lágrima.Además, cuando un amor se termina, hasta el cielo llora. No es una locura pensar que la vida es breve y no es otra cosa que nacer, envejecer y perder vitalidad. En último término, el que no ha sufrido por amor, no sabe lo que es sufrir.
El autor es: Abogado
adelsopalmar@gmail.com