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24-12-13.- Una oleada de bombardeos de Israel contra Gaza ha matado a una niña palestina de tres añosy ha dejado heridas a otras siete personas en la franja.

El masivo ataque israelí en el que participaron también baterías de artillería, carros de combate y fuerzas de infantería, según un comunicado militar, tuvo como objetivo las zonas alrededor de Rafah y Jan Yunes, en el sur de la franja, y Bet Lahiye en el norte. La pequeña, Hala Abu Sbeija, murió a causa de la metralla de un misil en uno de los ataques en el campo de refugiados de Al Mughazi, en el que también resultaron heridos su madre y uno de sus hermanos, informó Ashraf al-Qidra, portavoz del Ministerio de Sanidad en la franja.

Las autoridades israelíes atacaron en al menos doce ocasiones distintas instalaciones de las fuerzas de seguridad del movimiento islamista Hamás, que gobierna Gaza desde 2007, su milicia irregular los Batallones de Izadín Al-Kasam, y otras del movimiento de la Yihad Islámica. El Estado hebreo defiende que sus bombardeos responden a la muerte de Salah Abu A-Latif, un beduíno israelí de 22 años que trabajaba subcontratado para el Ministerio de Defensa de Israel, por disparos de un francotirador apostado en la franja.  

A-Latif, empleado de una empresa privada que reparaba los daños en la verja fronteriza causados por un reciente temporal, murió en un hospital poco después, a la vez que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, advertía desde la cercana ciudad de Sderot, donde se hallaba en un acto público, de una represalia que no tardó en llegar. «Si no hay calma en Israel no la habrá en Gaza», dijo el ministro israelí de Defensa, Moshé Yaalón, antes de comenzar la ofensiva, con la que Israel trata de restaurar el efecto de disuasión de la operación Pilar Defensivo, que dejó en noviembre de 2012 un balance de 170 palestinos muertos y seis israelíes.

Dos horas antes de comenzar los bombardeos israelíes, el Ministerio del Interior de Gaza había ordenado a todas sus fuerzas de seguridad que evacuasen todas sus bases e instalaciones, en previsión de una dura respuesta israelí. «Los lugares elegidos fueron un centro de fabricación de armas y una infraestructura de terrorismo en el sur de la franja de Gaza, un objetivo terrorista y otra infraestructura terrorista en el centro de la franja de Gaza, así como un lanzador de cohetes oculto en el norte de la misma», indicó el Ejército israelí en un comunicado.

Un alto mando israelí citado por la edición electrónica del diario Yediot Aharonot aseguró que «la División de Gaza está lista para una escalada de la violencia, aunque no es esa la intención de Israel». Mushir Al-Masri, portavoz de Hamás, acusó a Israel de querer «provocar la escalada» y le advirtió de que será «responsable de sus consecuencias». Según el portavoz, las facciones de Gaza se han reunido para decidir sus próximos pasos, aunque a la vez asesores del primer ministro del gobierno de Hamás, Ismail Haniye, han contactado con el Ejecutivo egipcio para tratar de frenar una espiral de violencia cuando ni Israel ni Hamás están interesados.

Desde el alto el fuego alcanzado después de la operación Pilar Defensivo, ambas partes han respetado de forma más o menos estricta los términos del acuerdo, si bien se han producido todo tipo de choques en la zona. Entre los principales problemas del último año están la muerte de nueve palestinos por entrar en la franja de seguridad de hasta 300 metros que Israel declaró unilateralmente en la zona fronteriza dentro del territorio palestino, el lanzamiento esporádico de cohetes contra territorio israelí y el descubrimiento de un túnel, obra de Hamás, que iba de Gaza al kibutz de Ein Hashloshá.