El 18 de noviembre de 2011 los presidentes de Rusia, Bielorrusia y Kazajstán firmaron la Declaración de la Integración Económica de Eurasia, ratificada el 29 de mayo de 2012 en Astaná, durante una reunión de jefes de la Unión Aduanera de los estados miembros, donde se aprobó un programa para la preparación del borrador del Tratado para la Unión Económica Euroasiática.
En abril de 2014 se discutirá el borrador de dicho Tratado para su aprobación durante la reunión del Consejo de la Comisión Económica Euroasiática, que tendrá lugar un mes más tarde, en mayo, y que será ratificado con la firma de los presidentes de los Estados miembros de la nueva Unión. Durante el segundo semestre del 2014 el Tratado que crea la Unión Económica Euroasiática será ratificado por los parlamentos de los estados que ingresan al Tratado y el 1 de enero del 2015 entrará en vigor.
Actualmente, expertos de los tres países trabajan duro para eliminar todas las barreras para la libre circulación de mercancías, servicios, capital y mano de obra entre los países miembros de la Unión y transformar por completo el espacio aduanero único en un espacio económico único.
El concepto de una Política Agro-Industrial Coordinada para los estados miembros de la Unión Aduanera y el Espacio Económico Único ya ha sido aprobado. Las medidas para la creación y desarrollo de un Sistema Informativo Integrado para el Comercio Nacional e Internacional de la Unión Aduanera ya ha sido establecido. Del mismo modo, se firmó el Acuerdo para la Cooperación Informática en la Esfera Estadística.
La más alta entidad de gobierno de la Unión Económica Euroasiática será el Consejo Supremo que estará conformado por los jefes de estado de los países miembros de la Unión y se reunirá por lo menos dos veces al año. Otro cuerpo dirigente de la nueva unión económica será el Consejo de la Unión, formado por los Primeros Ministros de Bielorrusia, Kazajstán y Rusia. Las reuniones de este Consejo que tratará una amplia gama de cuestiones socioeconómicas se llevarán a efecto por lo menos cuatro veces al año. Las cuestiones relacionadas con la revocación o modificaciones de actos ejecutados por el CCEE podrán también ser tratadas en las reuniones del consejo, pero la Comisión misma será el único ente regulador constantemente activo cuyas funciones incluyen la aprobación de decisiones en forma de resoluciones, decretos y recomendaciones relacionadas con las actividades de la Unión.
El órgano parlamentario de la Unión Económica Euroasiática será la Asamblea Interparlamentaria Euroasiática. Será un organismo unicameral para ocupará de las bases legales del funcionamiento de la Unión. La Asamblea estará compuesta por miembros elegidos en las cámaras bajas de los parlamentos de Bielorrusia, Kazajstán y Rusia. Cada miembro de la Asamblea tendrá derecho a un voto. Las reuniones de la Asamblea se llevarán a efecto una vez al año en San Petersburgo.
La ideología de la futura Unión Económica Euroasiática establece la igualdad en la votación en la toma de decisiones, lo cual la diferencia tajantemente de la Unión Europea donde las decisiones se toman según un sistema de cuotas y la parte de bloqueo la tienen unos pocos países dirigentes de la vieja Europa que, por regla general, mantienen a los europeos jóvenes y a otros elementos poco “fiables” de la estructura de la Unión Europea tales como Grecia y Portugal, lejos de la toma de decisiones.
La transformación de la Unión Aduanera en la Unión Económica Euroasiática y también los planes para que Kirguizstán y Armenia se unan a la troika aduanera, hace que la futura integración sea especialmente significativa desde el punto de vista internacional. La nueva Unión que abarca el territorio del corazón del viejo mundo, en el futuro se convertirá en el vínculo principal entre el sureste industrializado del continente Euroasiático y la península occidental de Eurasia, es decir, Europa.
Los puntales de acero de Eurasia en forma de una línea férrea que se extiende desde China a través de los territorios de Rusia y Turquía hacia Europa serán acompañados por un conjunto de gasoductos y oleoductos entre Rusia, China y Corea del Sur y entre los países de Asia Central y China, Pakistán y la India y entre Irán, Afganistán y Pakistán. Todos estos proyectos requerirán inversiones de miles de millones de dólares y naturalmente situaciones políticas estables. Es por eso que los principales estados de Eurasia se oponen terminantemente a los intentos de potencias extra continentales de ver a su continente como una suerte de “gran tablero de ajedrez”.
Una demostración del hecho que el proyecto de Unión Económica Euroasiática se está convirtiendo en atractivo para muchos países euroasiáticos, son las declaraciones de la Presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye en las que sugiere implementar la idea de la Gran Ruta de la Seda unificando las carreteras y las vías férreas de Corea del Sur, Corea del Norte y China, continuando luego a través de Rusia y los estados de Asia Central para finalmente llegar a Europa. La creación de una nueva Eurasia no es solo un simple sueño. Es una meta que se puede alcanzar. Una nueva Eurasia estimulará un nuevo flujo de inversiones y puestos de trabajo. Es esencial convertir a Eurasia otra vez en un continente verdaderamente unido y de este modo iniciar una nueva época, según dijo Park Geun-hye. En opinión de la presidenta, es también posible más adelante, unificar las redes energéticas de estos países. Vale la pena especialmente notar que hoy en día en Seúl y en otras capitales de los estados euroasiáticos, Eurasia es considerada el continente del mundo.
Fuente: http://www.nodo50.org/ceprid/spip.php?article1777
Traducido para el CEPRID (www.nodo50.org/ceprid) por María Valdés