Marcelo Salas
Aporrea
Creo que ningún personaje de la revolución, con la excepción del comandante Hugo Chávez, fue tan vilipendiado por la canalla mediática como Diosdado Cabello. Fue este el objetivo predilecto de la guerra psicológica lanzada contra nuestro pueblo chavista (principalmente). Se decía que tenía fortunas incalculables en paraísos fiscales, que era dueño de media Venezuela, que tenía “anillado” al presidente Chávez, sin embargo, no mostraron UNA SOLA PRUEBA de todo esto. De lo que si hay pruebas, es del hecho que Diosdado fungió durante los catorce años de Revolución como punta de lanza en las tareas más difíciles de afrontar. Desde que fue nombrado en CONATEL hasta su papel como presidente en la Asamblea Nacional, enfrentó todo tipo de subversiones e intentos por desestabilizar el país y el proyecto político chavista. No fue gratis todo este esfuerzo, ¿su recompensa? Ser la presa predilecta de los “Chacales Mediáticos” (Érika Ortega Sanoja DIXIT). Tanto fue el asedio que se hizo de su nombre y labor, que incluso en nuestras filas hubo más de uno que dudó, hasta que se acabaron todas las dudas el fatídico 5 de Marzo de 2013.
El día que el Comandante Chávez se despidió de su cuerpo físico para irse a poblar el alma de millones, Diosdado Cabello impulsó una de las defensas más férreas que se haya tenido memoria en nuestra patria. Gracias a él, a su empuje y determinación, fue posible aplacar las ansias de los golpistas y asesinos que quisieron luego de la victoria del presidente Nicolás Maduro, llenar de sangre y desasosiego las calles de nuestra Venezuela.
Ahora, la misión de Diosdado es otra. Tiene ante sí, junto con el Presidente Nicolás Maduro, la titánica labor de organizar una estructura popular que pueda hacer frente al proyecto de socavamiento del proyecto revolucionario.
Desde hace un tiempo para acá, todos hemos visto como ha bajado el perfil de Diosdado, pero contrario a lo que esperan los enemigos del país, esto se ha debido a que se encuentra (Gracias a los espíritus de la sabana y al Comandante Chávez) tejiendo “molecularmente” el dique de contención a los planes fascistas. Solo el trabajo de organización PUEBLO-PARTIDO-GOBIERNO, puede poner freno a la arremetida imperial. No hay otro camino. Es necesario que Diosdado, en su labor política, de apoyo al gobierno de su camarada y hermano (pues ambos – y todos- son –y somos- hijos de Chávez) comience a dejar como saldo, además de la organización de comandos electorales, grupos de inteligencia social, de acción ante contingencias, de articulación diaria con organismos de seguridad y defensa del estado, etc. En fin, la estructura total de participación y ACCIÓN REAL y CONTUNDENTE, frente a intentos de retroceder en las conquistas sociales alcanzadas.
Por último, leo –con gran júbilo- como el Presidente Maduro ha creado el Centro Estratégico de Seguridad y Protección de la Patria, urge que el partido enlace con dicha estructura para que “aguas abajo”, se consoliden acciones puntuales de defensa de nuestra soberanía, de nuestro futuro.
Adelante Diosdado, que tu labor sea la siembra de la patria futura que soñó el Comandante Chávez y que brega con devoción y sacrificio el Presidente Nicolás Maduro.
@ciberejercito