Telesur

 

16-10-13.- Los indígenas afectados por la contaminación que dejó la petrolera Chevron-Texaco, en la Amazonía ecuatoriana, hicieron un llamado de solidaridad mundial para enfrentar la demanda que la transnacional norteamericana entabló en Nueva York (este de Estados Unidos), acusando a las poblaciones originarias de supuesta “extorsión criminal”, buscando así no asumir sus responsabilidades ambientales.

 

“Pedimos que el mundo se solidarice con nuestra lucha. No somos mafiosos ni delincuentes, somos comunidades indígenas afectadas por la contaminación de Texaco” manifestó este martes Elías Piaguje, uno de los 60 afectados a quienes Chevron está enjuiciando en EE.UU. bajo la acusación de “extorsión” y “conspiración”.

Bajo el amparo de la llamada Ley Rico, aplicada a las mafias y el crimen organizado, Chevron acusa a los indígenas de ser de una organización criminal. La audiencia se efectúa sin la presencia de un jurado en Nueva York, desde este 15 de octubre.

Los indígenas y el Gobierno ecuatoriano denuncian que la petrolera creó el juicio para tratar de ocultar su negligencia durante el tiempo que operó en la Amazonía ecuatoriana, donde derramó más de 18 mil millones de galones de aguas tóxicas y lodos de formación, contaminando cerca de 450 mil hectáreas de terreno, en el período comprendido entre 1964 y 1990.

De igual manera, la transnacional también fue irresponsable en la remediación ambiental, ya que los efectos de sus derrames aún persisten en algunos afluentes de la zona, así como en aguas subterráneas, por la filtración del crudo de las piscinas junto a los pozos.

Este martes comenzó el juicio en una corte de Nueva York. El juez Lewis Kaplan ordenó que el proceso se desarrolle sin jurado, decisión rechazada por los afectados, ya que “el magistrado actúa bajo los intereses de la petrolera”.

Juan Pablo Sáenz, uno de los abogados de los afectados amazónicos, denunció que el mismo magistrado fue quien sugirió que sea inicie el proceso bajo la Ley RICO, así como también pone en duda que existan personas afectadas por la contaminación.

Asimismo, rechazó que el juez Kaplan quiera atribuirse jurisdicción universal, al señalar que su fallo debe ser “acatado en toda corte del mundo”. Por ello, Sáenz advierte que de ser el fallo desfavorable para lso afectados, apelarán ante cortes estadounidenses superiores.

Por su parte, Pablo Fajardo, también abogado de los afectados, advirtió que cualquier decisión del juez “no suspende, de ninguna forma, la sentencia dictada por una corte del Ecuador, que obliga a Chevron al pago de 19 mil millones de dólares por remediación ambiental”.

Por último anunciaron que en los próximos días iniciarán una campaña de recolección de fondos para continuar con el proceso judicial, debido a que las movilizaciones de los afectados hasta Nueva York son costosas.