RT-AP
1° de septiembre de 2013.- Mercenarios sirios de Goutha, en los suburbios de Damasco (capital siria), admitieron su responsabilidad en el ataque perpetrado con armas químicas el pasado 21 de agosto, suceso en el que perdieron la vida al menos 1.300 personas.
En una declaración a la corresponsal de la agencia Associated Press (AP), Dale Gavlak, los mercenarios señalaron que el “accidente” se produjo por el mal manejo de las armas químicas que les proporciona Arabia Saudita.
Según explicó la periodista, médicos y residentes de Goutha creen que los mercenarios recibieron las armas químicas del jefe de la Inteligencia saudí, el príncipe Bandar bin Sultan, y que fueron ellos “los responsables de llevar a cabo el ataque con gas”.
De acuerdo con algunos testimonios de los mercenarios “no estaban propiamente entrenados sobre cómo manejar las armas químicas o incluso que no les habían dicho que las armas eran químicas”, y dijeron que además “las armas iban destinadas al Frente Al Nursa, grupo afilado a Al Qaeda”.
La información obtenida por Dale Gavlak contradice completamente a los pretextos que airea el Gobierno de Estados Unidos, que insiste en preparar una ofensiva contra Siria alegando que el uso de armas químicas es por parte del Gobierno y no de los mercenarios.