Conmemoran miles la Marcha sobre Washington, en la que pronunció Yo tengo un sueño

Exigen fin a la violencia contra minorías étnicas y a los embates contra las garantías laborales

 

25 de agosto de 2013.- Decenas de miles conmemoraron el 50 aniversario de la Marcha sobre Washington por Empleo y Libertad encabezada por Martin Luther King, en la cual ofreció su famoso discurso Yo tengo un sueño, que marcó un punto clave en el movimiento masivo por los derechos civiles y la promoción de reformas, incluido el sufragio efectivo de los afroestadunidenses en este país.

 

Algunos la consideran la manifestación masiva más famosa en la historia del país, con las icónicas imágenes de más de un cuarto de millón de personas y el reverendo King pronunciando su discurso.

En el mismo lugar frente al monumento a Lincoln donde habló King, oradores de una amplia gama de sindicatos nacionales, organizaciones por los derechos civiles, de la comunidad afroestadunidense, iglesias, de defensa de migrantes, de la comunidad latina, por los derechos de las mujeres y los gay, figuras como el reverendo Jesse Jackson, el legendario cantante Tony Bennett, el reverendo Al Sharpton (principal organizador del acto con su organización, National Action Network) y el hijo de King, además de figuras políticas, incluido el procurador general de Justicia Eric Holder y la lideresa de la bancada demócrata en la Cámara Nancy Pelosi, recordaron el sueño de King por una sociedad que cumpla los ideales democráticos y la igualdad racial y económica.

Enfatizaron que el acto no era sólo para recordar, sino para resucitar el movimiento en demanda del sueño. Se resaltaron las luchas libradas por las nuevas generaciones (jóvenes en batalla por los derechos de los migrantes, estudiantes defendiendo la garantía a la educación, jóvenes respondiendo ante la violencia contra ellos por autoridades y leyes, entre otros), sobre todo ante los nuevos desafíos, como intentos por suprimir el voto efectivo de las minorías.

El representante federal John Lewis, quien hace 50 años fue el orador más joven único sobreviviente del elenco principal que habló en la marcha del 28 de agosto de 1963 declaró hoy ante la multitud:

«No nos podemos rendir, no nos podemos doblegar. Yo fui arrestado 40 veces durante los años 60, golpeado hasta quedar inconsciente y sangrando. Pero no estoy cansado, estoy listo para luchar y continuar luchando, y ustedes tienen que luchar».

Otros de los principales temas hoy abordados, tanto por los oradores como en pancartas y camisetas de los participantes que llegaron de múltiples puntos del país, eran la violencia contra jóvenes de minorías, señalando el caso del joven Trayvon Martin, asesinado en Florida (cuyos padres hablaron desde el podio) por un vigilante armado que hace un mes fue exonerado por un jurado; nuevos intentos por obstaculizar el voto de las minorías, tanto por decisiones recientes de la Suprema Corte como mediante nuevas leyes en Texas y Carolina del Norte; el asalto contra los derechos laborales, y migración, que para muchos es un nuevo movimiento por las garantías civiles.

Lana Shells, de 69 años, no pudo llegar a la primera marcha en 1963, pero hoy se sumó a la multitud. No pensaba que después del doctor King estaría aquí llorando por los mismos temas. Pienso que nos quedamos dormidos y ahora necesitamos despertar todos, pobres, negros e hispanos, comentó en entrevista con el Washington Post.

La fecha exacta del aniversario, el próximo miércoles 28, se celebrará con diversas ceremonias y discursos del presidente Barack Obama y los ex mandatarios Bill Clinton y Jimmy Carter

 

 

La concentración se llevó a cabo frente al obelisco en la capital

estadunidense Foto Ap

John Lewis, el orador más joven en la movilización del 28 de agosto de 1963,

llamó ayer a los estadunidenses a luchar» Foto Ap