Santiago de Chile, julio 11-2013. – La jornada de movilizaciones y de paro nacional en Chile arrancó a las 00H00 de este jueves (04.00 GMT), con un “cacerolazo“ en distintos puntos de la capital, aunque especial atención tuvieron las decenas de manifestantes que se concentraron frente al Palacio de la Moneda, sede del Ejecutivo, e hicieron sonar sus ollas y cacerolas en protesta contra el Gobierno central.

Al mismo tiempo, centenares de dirigentes y trabajadores llegaron hasta la Plaza de La Ciudadanía, frente al Palacio de La Moneda, portando banderas y lienzos y apoyando el caceroleo, una iniciativa que se repitió en otros lugares de la capital chilena.

 

La manifestación pacífica no estuvo exenta de problemas, debido al atropello policial, pese a que la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Bárbara Figueroa, pidió a la Policía transitar por el otro lado de la Alameda, la principal avenida de la capital chilena.

Precisamente, la CUT, con el apoyo de estudiantes, trabajadores y pueblo en general, convocó una protesta nacional para este jueves, en demanda de mejoras laborales y salariales, el término de las Administradoras de Fondos de Pensiones y una educación gratuita y de calidad.

Otras demandas básicas de la CUT son establecer una nueva institucionalidad laboral, además de una reforma tributaria que reparta los ingresos y contribuya a terminar con la desigualdad existente en el país.

Por ello, están previstas movilizaciones en varias ciudades del país y un paro nacional. Aunque los organizadores de la jornada prefirieron no vaticinar un número de participantes, aseguraron que “será una jornada histórica”.

Al llamado de la CUT se sumó la Asociación Nacional de Empleados Fiscales, el Colegio de Profesores, las confederaciones de Funcionarios de la Salud Municipalizada, de Trabajadores del Cobre y gremios de obreros forestales, portuarios y del comercio, entre otros gremios ya constituidos.

De igual manera, acató el llamado la Confederación de Estudiantes de Chile, organización que congrega a estudiantes de unas cuarenta universidades públicas y privadas.

En vista de ello, los organizadores señalaron que en las calles de Santiago y otras ciudades del país también estarán presentes anhelos de los movimientos sociales, como educación pública, gratuita y de calidad, salud decente y la renacionalización del cobre.

La titular de la CUT prometió que será una jornada marcada por el sello de los trabajadores, «un actor que hasta ahora se ha solidarizado con las demandas de los otros actores y que hoy día asume un rol protagónico con este llamado a paro».

Hasta altas horas de la noche del miércoles se extendieron las negociaciones entre la dirigencia de la CUT y la Intendencia Metropolitana, para llegar a un acuerdo sobre los rutas que seguirán las marchas. El recorrido final aún no está definido.