
El porcentaje de gente que cree que el Estado se tiene que ocupar directamente de temas como la sanidad o las pensiones es significativamente alto en España, con un 85 por ciento.
Los encuestados son también partidarios de que el Estado se encargue de controlar los beneficios de las empresas, los precios, los salarios…ya que consideran que el libre mercado es “la causa de las desigualdades sociales”.
En España, sólo uno de cada cinco ciudadanos se muestra favorable a las medidas neoliberales que comportan privatizaciones y recortes sociales y abogan por subir impuestos a los más ricos.
Los encuestados también reclaman limitar los ingresos de los ejecutivos de los bancos, regular la banca y aumentar la inversión pública.
