
El mandatario boliviano, para explicar la fuerte vigilancia del personal de seguridad del difunto presidente venezolano, recuerda que “en una oportunidad en Bolivia, le ofrecí un vaso de café a Chávez, pero su equipo de seguridad se opuso. Y el hermano Chávez dijo (a su seguridad): ‘no, no, no’ ¿cómo van a pensar que el Evo me va a estar envenenando’ y se sirvió el café».
El presidente boliviano, para recalcar lo extraño de su muerte, comenta que “Chávez tenía 58 años y era un militar bien preparado”.
Morales ha matizado que “el imperio como no puede derrotar (a sus adversarios) asume esa tarea de acabar con la vida, como pasó (con el líder palestino Yaser) Arafat, muerto en 2004, sobre quien se sospecha que falleció por polonio, una sustancia radioactiva”.
Hugo Chávez falleció el pasado martes en un hospital militar en Caracas, la capital venezolana, casi tres meses después de ser sometido a una cuarta intervención quirúrgica para combatir el cáncer que se le detectó en junio de 2011.
