A través de un comunicado emitido por la Cancillería ecuatoriana, la administración del presidente Rafael Correa reiteró su “repudio ante las acciones intimidatorias, amenazas, campañas de desinformación, presión política y mediática que realiza la empresa Chevron dirigidas a desacreditar al Estado ecuatoriano y a su gobierno”.
El fallo invocó el Tratado Recíproco de Inversiones entre Ecuador y EEUU, que entró en vigor en 1997, y que ha sido denunciado por el país andino para su anulación, por considerarlo lesivo a sus intereses.
El comunicado agrega que “se debe señalar que ningún funcionario de esta empresa, que impulsa una campaña irresponsable contra el Estado y pueblo ecuatorianos, ha tomado contacto con el Presidente de la República o con el Ministro de Relaciones Exteriores”.
Medios privados de comunicación ecuatorianos publicaron que Ecuador ha acudido a organismos regionales para que medie en el caso Chevron.
Al respecto, la Cancillería señaló en el texto que “frente a noticias difundidas por algunos medios de comunicación, el Gobierno de la República del Ecuador desea aclarar que en ningún momento el Estado ecuatoriano ha buscado mediación con instancias regionales de integración, en los casos que promueve la compañía Chevron en contra del Estado ecuatoriano”.
Agrega que “los pronunciamientos de apoyo de gobiernos amigos están dirigidos a advertir a esta transnacional de su comportamiento lesivo a los intereses del pueblo ecuatoriano, por sus campañas de desprestigio y artificios legales para desconocer sus responsabilidades jurídicas”.
La semana pasada, el X Consejo Político de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba) rechazó las acciones de Chevron contra Ecuador.