
Un centenar de personas protestaron frente al canal que transmite el espacio de ficción, RCN Televisión, y entregaron a los responsables de la cadena una carta dirigida al propietario, Carlos Ardila Lule, y al director del canal, Gabriel Reyes.
Los firmantes de la carta consideran que el retrato que hace la serie, en el aire desde el pasado 4 de marzo, no corresponde a la realidad y se sienten heridos en la “dignidad” por “la insolente ignorancia con que se plantea la historia”.
“El paramilitarismo no es un producto de venganzas y pasiones personales y las consecuencias de su accionar, que ha dejado millones de familias desplazadas y cientos de miles de hombres y mujeres asesinadas, desaparecidas, torturadas y masacradas no son el resultado de una decisión aislada y solitaria de los hermanos Castaño Gil”, agrega el documento.
Con la emisión de una serie que hace este planteamiento RCN desatiende “la responsabilidad ética y social” que cabe esperar de “uno de los medios de comunicación más poderosos y de mayor audiencia de Colombia frente a una historia de violación sistemática de los derechos humanos”.
Asimismo, las víctimas advierten de que “la libertad de expresión y de pensamiento no puede ser el argumento para explicar la emisión de ‘Tres caínes’”, en tanto que se propagan, a su juicio, “ideologías contrarias a los principios de la democracia” y hacen “apología al paramilitarismo y al crimen”.
Entre los firmantes se encuentran la hijas natural y de crianza de Carlos Pizarro, líder de la guerrilla desmovilizada del Movimiento 19 de Abril (M-19) asesinado por paramilitares en 1990, así como María Eugenia Guzmán, la viuda de José Antequera, dirigente nacional del exterminado partido de la Unión Patriótica.