Gabriel Valente Rama (*)
La contundencia de los datos es impresionante: 737 multinacionales monopolizan el valor accionarial del 80% de total de las grandes compañías del mundo, y solo 147 controlan el 40% de todas ellas. La incontratable realidad economica y financiera muestra como el capitalismo depredador se fusiona y metaboliza para avanzar en el control de la base del desarrollo humano, dede antes del nacimiento hasta la inevitable muerte.
Las quimeras lanzadas por lideres supuestamente progresistas quedan hechas trizas ante tan implacable realidad del sistema economico mundial gerenciado por el G7 y sus aliados titeres. Ya no hay espacio para el autoenganho o supuestas salidas neokeynesianas ante la «autocrisis» del capitalismo arremetiendo contra los trabajadores europeos o estadounidenses.
Los mecanismo de concentracion y dominacion desplegados desde los poderes ocultos solo visualizados como organismos internacionales economico-financieros (FMI, BM, OMC) bancos publicos (Reserva Federal, Banco Central de Europa) o privados, gobiernos de paises centrales como fuerzas de invasion (OTAN), u organismos «tecnicos» internacionales (ONA, ONADI, OMPI, OMS) develan la magnitud de las fuerzas desatadas por los capitalistas que se divierten con la quejas de presidentes de algunos paises que osan confrontar con ellas.
Los mecanismo de produccion (ciencia y tecnologia), distribucion (transporte y logistica) y consumo (hipermercados globales) y venta ( propaganda y publicidad por TV, radio, medios digitales y graficos) son controlados por estas empresas conectadas globalmente a la propia fuente de alimentacion del sistema (energia, alimentos, medicamentos, construccion, industria, educacion, cultura, recreacion): todas las actividades humanas han sido apropiadas esencialmente por monopolios u oligopoleos transnacionalizados.
Cualquier programa economico implementado por gobiernos de paises en desarrollo debera partir de las verdaderas causas de las recurrentes crisis por las que transcurren las economias, que, al analizarse con la logica de los mercados (tanto desde el neoliberalismo o el neo keynesianismo) caeran mas temprano que tarde en sus propias contradicciones y se alejaran del acontecer cotidiano de la realidad en la que viven centenares de millones de personas en el mundo.
Esta logica timorata pseudoprogresistas crea falsas espectativa y limitaciones economicas en los pueblos y abre la puerta a los originales representantes del verdadero poder economico en los diversos territorios controlados por los 737 monopolios que actuan en todos los paises.
Hasta no romper con los paradigmas capitalistas, miles de millones de personas continuaran dominadas por una oligarquia global que subsume a la poblacion en el bloqueo de su conciencia que la hace negar su propia razon de existir para ser meros consumidores de los bienes y servicios suministrados por estos conglomerados multinacionales.
(*) Gabriel Valente Rama es Economista
