Una investigación socio-ambiental y sanitaria a través de técnicas cualitativas y relevamiento epidemiológico cuantitativo |
Un estudio interdisciplinario, presentado durante las Jornadas de Patología Ambiental realizada en el Hospital nacional de Clínicas el pasado 7 de diciembre, calificó de muy grave el escenario socio-ambiental de la ciudad de Malvinas Argentinas en Córdoba, y recomiendan no someter a la población a efectos de contaminantes que intensificarían el cuadro de vulnerabilidad. Es críticamente peligrosa, afirma el estudio, la exposición al polvo de cereales transgénicos que emanan de los silos y otros tóxicos propios de la actividad productiva de Monsanto, si está se instalará en dicha localidad.
Resumen ejecutivo
Durante las Jornadas de Patología Ambiental realizada en el Hospital nacional de Clínicas el pasado 7 de diciembre, un equipo de docentes e investigadores de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Córdoba presentó un análisis de la situación sanitaria de Malvinas Argentinas.
A partir de un estudio interdisciplinario, los científicos califican de muy grave el escenario socio-ambiental de aquella ciudad, y recomiendan no someter a la población a efectos de contaminantes que intensificarían el cuadro de vulnerabilidad. Por lo tanto, es críticamente peligrosa la exposición al polvo de cereales transgénicos que emanan de los silos y otros tóxicos propios de la actividad productiva de Monsanto, si está se instalará en dicha localidad.
Los investigadores concluyen que «La vulnerabilidad social y económica de la población es las más altas en la Provincia de Córdoba y la capacidad del Estado Municipal de responder a la demanda de enfermedad es mínima. Someter a esta población a un nuevo golpe en su salud ambiental, como el que generará una enorme planta de semillas transgénicas de Monsanto en su jurisdicción no es recomendable desde el punto de vista médico, y es intolerable desde el punto de vista social.»
La investigación realizada por las Doctoras Ruderman L y Cabrera Fasolis B, Prof. Dozzo Gl, Prof. Nota C. y Dr. Avila Vazquez M, de cuatro cátedras distintas de esa facultad, requirió 4 meses de trabajo para revisar información sociológica y económica de la localidad y para construir un diagnostico suficientemente consistente. Aplicaron técnicas cualitativas y cuantitativas que incluyeron 25 entrevistas a vecinos destacados y un relevamiento epidemiológico del pueblo que recabó datos sanitarios directos de 3563 pobladores.
La primera conclusión fue que Malvinas Argentina posee el perfil de enfermedades que caracteriza a los pueblos fumigados en la Argentina. Dentro de las principales enfermedades detectadas los profesionales puntualizan que «las neumopatías obstructivas son las enfermedades más frecuentes y junto con las dermatitis su presencia es mayor en las zonas periféricas. La prevalencia de abortos espontáneos es de 22 por cada 100 mujeres en edad reproductiva, la más alta registrada en el país y junto con los numerosos casos de niños con malformaciones congénitas en las zonas más fumigadas del pueblo, expresan el impacto de los pesticidas en la salud reproductiva de la población. Los tumores y cánceres detectados también siguen el patrón de distribución que prioriza las zonas del pueblo expuestas a agrotóxicos.»
Esta investigación fue motorizada por la radicación de una planta fabril de semillas transgénicas de maíz de la firma Monsanto en el mismo pueblo, emprendimiento que es una amenaza concreta para la salud ambiental de la Ciudad de Malvinas Argentinas. Parte de los objetivos fue precisar si la comunidad de Malvinas Argentinas está en condiciones de soportar una nueva e intensa carga de agresión ambiental.
Pueblo dormitorio y pesticidas
La ciudad se encuentra inmersa en una zona rural de gran actividad productiva y sus habitantes reúnen todas las condiciones para ser considerados un «pueblo fumigado»; es decir, las aplicaciones de pesticidas se realizan intensamente alrededor del mismo, sin existir retiro ambiental real (los cultivos y fumigaciones llegan hasta el mismo borde de las viviendas), de manera que la deriva de los pesticidas caen sobre la población exponiéndola a sus efectos deletéreos.
El último censo encontró que es la ciudad más pobre de la Provincia, con el mayor valor de NBI (25,7%) y 2/3 de su joven población está desocupada o tiene empleo precarizado. El 70.4% no tiene acceso a obras sociales para la atención de salud y el sistema público local es bastante insuficiente. Las entrevistas realizadas con informantes claves, revelan a la localidad como «ciudad dormitorio», pues las actividades laborales se desarrollan fuera de su ejido, más precisamente en la ciudad de Córdoba.
La provisión de agua potable proviene de fuentes subterráneas; se extrae de pozos ubicados en la localidad. El agua tiene muy mala calidad, es salitrosa, tiene mal gusto, color y olor. Los vecinos compran agua mineral para beber. No hay red de cloacas. La provisión de energía eléctrica es a través de EPEC y el gas natural de red sólo cubre al 30% del pueblo y al parque industrial.
La gran cantidad de pobladores sin acceso a servicios privados de salud los convierte en dependientes absolutos de la salud pública. El estado municipal sostiene tres centros de salud, uno en cada sección, que carecen de un enfoque de atención primaria de la salud, y menos aun de salud como derecho. La relación de la sociedad con el servicio de salud no es buena, aunque en los últimos años los actuales funcionarios se esfuerzan por mejorarlo tratando de introducir criterios más avanzados y solidarios en el trabajo.
La salud según los pobladores
La información recabada es coincidente con respecto a la existencia de una población que padece de enfermedades respiratorias de una manera llamativamente más frecuente e intensa que en otras poblaciones. A nivel infantil, bronquiolítis, bronquitis obstructivas, asma y «alergias» comprometen a la mayoría de los niños del pueblo. Este problema se lo vincula a la existencia de polvo aerolizado en el ambiente, proveniente de los campos circundantes y que el viento contante y más intenso entre septiembre y abril (generalmente vientos del este o este/nordeste), vuelca sobre el pueblo.
Es muy importante La preocupación de la comunidad educativa de la Escuela Provincial Capitán Luis Zenobio Candelaria, la principal escuela primaria y jardín de infantes de la ciudad, por la presencia, a escasos 700 m, de la planta de Malvinas Argentinas en construcción con sus 240 silos de almacenaje de granos transgénicos (Fig. 4). Muchos padres le manifestaron a los investigadores que creen que será necesario trasladar la escuela de ese lugar (el extremo noreste de la ciudad), porque la contaminación del ambiente generada por la planta de Monsanto pondrá en serio peligro la salud de los niños. Además la escuela está instalada en el extremo de un predio que se utiliza para agricultura tóxica (sembrar soja o maíz transgénico), por lo que fue fumigado intensamente con los niños en la misma escuela en los años anteriores.
Malvinas refiere una prevalencia de 15,46% en neumopatías recidivante, la zona más expuestas a fumigaciones (Bº Nicolás de Bari) tiene un 20.25%, la población las vincula a la elevada contaminación del aire con polvo levantado desde los campos vecinos. El pueblo no tiene acopios de granos actualmente (no hay silos), pero Monsanto está construyendo una fabrica que necesita almacenar una enorme cantidad de granos y prevé construir 240 silos de 16 tn cada uno. La experiencia de los pueblos agrícolas nos enseña que vivir alrededor de los acopios de granos es de alto riesgo para patología respiratoria; la prevalencia llego a 49%, incluso con dosajes de IgE (+) especificas para cascarilla de maíz, en un estudio realizado en Marcos Juárez, cuando los vecinos viven a menos de 1000 metros de los silos, el polvillo de los granos no es solamente un polvo molesto.
Otro problema de salud que emergió en la exploración fue la importante cantidad de patología dérmica del tipo de dermatitis atópicas o dermatosis pruriginosas; un 10% de los pobladores tienen dermatitis, pero en la zona más fumigada (Bº Nicola de Bari) esta tiene una ocurrencia tres veces mayor.
En los sondeos de opinión realizados los trastornos reproductivos, sobre todo abortos espontáneos, también se visualizaron como de muy alta incidencia; si bien ello no cuenta con una explicación clara para los entrevistados, podría ser porque es una población de familias muy jóvenes con embarazos frecuentes, o que refleje manifestaciones de violencia de género. La violencia de género también se expresó como una de los problemas socio-sanitario a enfrentar.
Impactos consistentes en la salud colectiva
Los resultados de salud reproductiva hallados en el relevamiento de salud, coinciden con la preocupación detectada en la exploración de opiniones. 178 mujeres declararon haber tenido por lo menos un episodio de aborto espontaneo en los últimos años, una prevalencia de 22 por 100 mujeres en edad reproductiva (MER) en la muestra estudiada. Nuevamente Bº Nicola de Bari tiene el valor más elevado (25.6%). En general se reconoce que 15 o 20 de 100 embarazos diagnosticados se pierden y se identifican como abortos espontáneos. Al ser este un análisis poblacional y no contar con el denominador exacto de a qué cantidad de embarazos corresponden esos 178 abortos espontáneos, se evaluaron por 100 MER.
El Centro de Estudios de Estado y Sociedad (CEDES) y el Centro de Estudios de Población (CENEP) a pedido del Ministerio de Salud de la Nación Argentina, estimaron una tasa de abortos inducidos en Argentina (para el año 2004-2005) de 60 por 1000 MER (equivalente a 6.0%) y se reconoció que el 10% de todos los abortos corresponden a los abortos directos, no inducidos o espontáneos. Utilizando esta información se estima que en Argentina los abortos espontáneos tienen una prevalencia de 0.6%MER.
Un valor de 22% de abortos espontáneos en Malvinas Argentinas nos dice que algo grave está pasando. Estos valores se corresponden con los hallados por el grupo de investigación de la Dra. Aiassa (Universidad Nacional de Rio Cuarto y el CONICET), quien encuestando 166 hogares de la localidad de Las Vertientes en Provincia de Córdoba, Argentina, en el año 2008 encontró que el 19% de MER tuvieron 1-2 o más abortos espontáneos (también halló que el 42% de los hogares referían asma o alergias). Estos valores le están dando la dimensión a un problema referido por médicos obstetras y generalistas de cientos de pueblos fumigados en la Argentina. Por otra parte, no encontramos que otros factores de mal pronóstico para salud reproductiva estén actuando en la población; la mayor parte de las familias son jóvenes, lo que contribuye a la salud reproductiva de este grupo y, contrariamente, agrotóxicos y pérdida de embarazo es una relación cada vez más notificada en todo el mundo.
Los defectos al nacer encontrados en la encuesta fueron 42 casos, sin datos sobre la cantidad de embarazos que los generó, los investigadores analizaron su distribución en la localidad. El Bº Nicola de Bari tiene 1.83 casos por cada 100 vecinos encuestados (10/546), mientras que la zona menos expuesta a agrotóxicos tiene 0.66% (3/451) la probabilidad de la ocurrencia de malformaciones es 2.79 veces mayor en N.de Bari. El aumento de malformaciones congénitas y su lazo con exposición a pesticidas cada vez es más reconocido en la literatura científica. En este estudio también se verifico que hay mayor probabilidad de tener hijos con malformaciones si el hogar está más cerca de campos fumigados con agrotóxicos.
Presencia de tumores o cáncer entre los habitantes de las viviendas fue otra de las búsquedas realizadas en la población estudiada; se detectaron 61 casos entre 3563 encuestados, la tasa de prevalencia está dentro de las frecuentes a nivel mundial (1.71%). Sin embargo nuevamente se destaca la elevada frecuencia en el sector más expuesto a las aplicaciones de tóxicos agrarios: 10/546, mientras en la zona central no encontraron ninguna caso de enfermedad oncológica (al menos entre los pobladores entrevistados) 0/451; el riesgo de que ocurra cáncer en Nicola de Bari fue de 8.4 veces mayor (P=<0.015), y una mayor prevalencia tuvo la 1º sección con 29/1383 encuestados (2.10%). Cáncer y pesticidas es una relación muy estudiada y verificada, incluso con precisa plausibilidad biológica, y con publicaciones de alta calidad que incluyen revisiones sistemáticas de Medicina Basada en la Evidencia.
No se pudo acceder a las causas de mortalidad de esta población en los últimos años (porque la Municipalidad y la Provincia negaron los datos a los investigadores) lo que impidió saber si Malvinas Argentinas reitera el patrón de Bº Ituzaingo Anexo, donde el 33% de los vecinos murieron con cáncer en los últimos 10 años, y cáncer y tumores son la 1º causa de muerte local, mientras que, en ciudad de Córdoba o en toda la República Argentina son la 2º causa con el 19% de los óbitos y la mortalidad global es encabezada por causas cardiorespiratorias. . Un cuadro epidemiológico muy similar fue encontrado por la Facultad de Ciencias Médicas de Rosario explorando causas de muerte en pueblos del sur agrario santafesino: Murphy tiene un 30% de fallecidos por cáncer, ¿cuántos tendrá Malvinas?
Conclusiones de la investigación
A través del análisis cualitativo y cuantitativo de la salud colectiva ambiental de la ciudad de Malvinas Argentinas se reconoce que presenta el perfil de enfermedades que se reiteran en las poblaciones expuestas a pesticidas aerolizados de la Argentina.
El alto impacto encontrado en salud reproductiva, respiratoria y dérmica más la distribución espacial de las mismas, incluyendo tumores y cánceres, con mayor presencia en las zonas más expuestas a los pesticidas, reflejan grados de vulnerabilidad ambiental muy grandes. La vulnerabilidad social y económica de la población es de las más altas en la Provincia de Córdoba y la capacidad del Estado municipal de responder a la demanda de enfermedad es mínima.
Someter a esta población a un nuevo golpe en su salud ambiental, como el que generará una enorme planta de semillas transgénicas de Monsanto en su jurisdicción no es recomendable desde el punto de vista médico e intolerable desde el punto de vista social.