Mohamed Shaikhibrahim uno de los jóvenes que participó en la revolución que culminó con la caída de Hosni Mubarack afirmó a la prensa internacional que “la revolución de la libertad y de la justicia social arrancó aquí, en esta plaza. Desde que se corearon los primeros eslóganes hasta ahora, dos años después, los rebeldes de Taharir siguen pidiendo lo mismo: la revolución seguirá hasta que se les escuche”.
Otro de los jóvenes de la Plaza Tahrir, Mouna Abed al Fatah, expresó que su deseo de que “todos los egipcios que hicieron la revolución y piensan que sus objetivos no han sido alcanzados que no tengan miedo y sigan diciendo NO”
El llamado a manifestar surge luego de la ola de disturbios del pasado viernes, en los que una persona murió y 216 ciudadanos sufrieron heridas.
El viernes pasado, la Policía antimotines y los custodios de la residencia ejecutiva emplearon con profusión gases lacrimógenos y chorros de agua a presión para detener a los manifestantes que se encontraban frente al Palacio Presidencial, exigiendo la dimisión del jefe de Estado.
Los opositores egipcios consideran que Mursi está intentando monopolizar el poder y le responsabilizan de la crisis política y económica que se vive en el país. Exigen al mandatario la formación de un nuevo gobierno de coalición y también garantías de que las próximas elecciones parlamentarias sean equitativas y libres.
Los opositores quieren que el presidente forme una comisión para enmendar la Constitución que recién adoptó el país, la cual fue redactada por un panel encabezado por los islamistas y aprobada en diciembre pasado, durante un controversial referendo.
Los jóvenes egipcios aprovecharán este 11 de febrero para conmemorar la caída del expresidente Hosni Mubarak.
Mubarak, quien contó con el apoyo de Estados Unidos, fue obligado a renunciar tras 18 días de protestas masivas en El Cairo (capital) y otras ciudades del país en las que murieron más de 800 personas, según datos oficiales.