06/02/13.-El mayor escándalo en la historia del fútbol ha dejado a este deporte en una situación de profunda crisis, al revelarse el desmantelamiento de una vasta red de manipulación de cientos de partidos en el mundo, principalmente en Europa, pero que no excluye a Centro y Sudamérica.

La red involucra a 15 países y documenta al menos 150 casos que han permitido detener a 50 personas y que se giren otras 28 órdenes de aprehensión.

“Esto es sólo la punta del iceberg”, aseguró Rob Wainwright, director de Europol, después de anunciar que se sospecha de una mafia de apuestas ilegales que manipuló resultados de casi 700 partidos por todo el mundo, de los que 380 corresponden al futbol europeo.

De la investigación (llevada a cabo por las policías de Alemania, Hungría, Eslovenia, Finlandia y Austria, con la colaboración de otros ocho países) se deduce que, desde 2008, una red de apuestas ilegales con base en Singapur pudo haber amañado el resultado en 380 partidos.

En esta actividad ilegal estarían implicados 425 dirigentes deportivos, árbitros y jugadores, de los que 151 viven en Alemania, 66 en Turquía y 29 en Suiza.

Wainwright mencionó un partido clasificatorio para el Mundial en la Confederación Norte, Centroamericana y del Caribe de Futbol, así como un choque entre Argentina y Bolivia en categoría Sub-20 dentro de la investigación que llevó a cabo la policía europea con el nombre de Veto.

Los encuentros bajo sospecha incluyen las eliminatorias para el Mundial y la Eurocopa, la Liga de Campeones de Europa, así como partidos en Asia Central, Sudamérica y África.

En el duelo entre Argentina y Bolivia Sub-20 aludido por Wainwright, el árbitro húngaro Lengyel Kolos añadió 12 minutos de tiempo extra; la escuadra albiceleste anotó en el minuto final para ganar 1-0 gracias a un penal señalado por Kolos.

El problema es muy grave, advirtió Wainwright, quien añadió que este lunes fue un día triste para el futbol europeo porque reveló una nueva prueba de la corrupción en la sociedad, además de destapar una profunda red criminal.

Wainwright habló durante una conferencia de prensa en La Haya de manipulaciones “a un nivel nunca visto” en encuentros disputados entre 2008 y 2011.

Reino Unido y Holanda son otros de los países afectados, pero la Europol cree que detrás del escándalo de apuestas está un grupo del crimen asiático.

Friedhelm Althans, comisario de policía de la ciudad alemana de Bochum, explicó que ninguna liga o país deben sentirse ajenos a este problema porque un partido manipulado puede involucrar a 50 personas en 10 naciones.

“Encontramos que 150 de los 425 sospechosos tienen residencia en Alemania, pero no quiere decir que todos sean alemanes, correspondan a partidos alemanes o sean árbitros alemanes”.

Las investigaciones de la Europol duraron 18 meses. “Los jugadores o árbitros que fueron sobornados son sólo los últimos coludidos”, dijo Althans.

“Los cabecillas están en Asia”, añadió el alemán, quien aseguró que los sobornos ascendían hasta 100 mil euros (cerca de 130 mil dólares) por partido.

“Tenemos pruebas para 150 casos. Las actividades de sobornos hasta de 100 mil euros vienen de Singapur”, señaló Althans.

En total se pagaron más de dos millones de euros en sobornos a jugadores y dirigentes, y las sumas de las ganancias por las apuestas equivaldrían a ocho millones de euros, según cálculos de la Europol.

“Es la primera vez que tenemos pruebas sustanciales de que hay crimen organizado en el mundo del balompié”, señaló Wainwright.

El presidente de la Federación Internacional de Futbol Asociado (FIFA), Joseph Blatter, señaló que el organismo “trabajó con la policía para ayudar en la lucha contra la manipulación de partidos.

“Repito, es un tema importante para el futbol y los gobiernos”, añadió el suizo. La FIFA coopera con la Interpol desde 2011.

“La manipulación de partidos es un gran problema y no es algo que vaya a desaparecer mañana. La FIFA y toda la familia del futbol están obligados a luchar en contra, pero no podemos hacerlo solos”, dijo el director de seguridad del ente rector del balompié mundial, Ralf Mutschke.

El ex director de Interpol, que actualmente trabaja para la FIFA en materia de seguridad, advirtió el pasado 16 de enero que ninguna liga en el mundo está a salvo de la corrupción e hicieron un exhorto para que los gobiernos endurezcan las legislaciones y hagan un frente común contra estas prácticas ilegales.