Morales, en origen un labriego y pastor de ovejas, postuló combatir el narcotráfico con medidas que vulneren los dispensarios de las bandas de narcotraficantes, es decir la supresión del secreto bancario en la UE y Estados Unidos.
Su ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, ex militar, dijo que como nunca en la historia éste es el tiempo más beligerante en el mundo.
También urgió a enfrentar la crisis financiera que sacude Europa y los mismos EEUU, con una política de democratización de la economía y lejos del capital financiero internacional en pocas manos.
Adalid de los derechos de la Madre Tierra y opositor a ultranza del calentamiento global y la venta de bonos de carbono, también se dijo contrario a la denominada ‘economía verde’.
‘La crisis financiera no se resuelve con más plata para el capitalismo, una cosa es la propiedad privada, las empresas, saludamos, pero concentrar el capital en pocas manos de manera exagerada no es ninguna solución y eso no es experiencia en Bolivia, y tan importante había sido la democratización de la economía’, postuló.
El gobernante sudamericano pareció aguijonear a los líderes europeos que asistieron a la Cumbre CELAC-UE.
‘Con mucho respeto a los países desarrollados de Europa, quiero decirles y la crisis humanitaria también crisis ambiental. La economía verde no es la solución, la economía verde es la mercantilización de la naturaleza y los países desarrollados deben asumir la deuda climática y no nos vamos convertir en guarda bosques del primer mundo’, sostuvo.
En el pico más alto de su alocución de 25 minutos, el mandatario boliviano pidió detener las guerras desatadas en diversos puntos del planeta.
‘Detener la guerra para salvar a la humanidad. No es posible en tiempos, en nuevos tiempos, tiempo de Pachakuti, que pueda haber todavía intervención con cualquier pretexto, que ‘terrorismo’, que el ‘narcotráfico’, que la ‘división’ (o secesión).A veces algunas potencias intentan la división para justificar la intervención’, denunció.
Entre sus propuestas se opuso a la competitividad y enarboló las banderas de la complementariedad de las economías y el comercio.
‘Quinto desafío (..) La competencia es como una actividad deportiva, en una competencia hay un ganador de medalla de oro, medalla de plata, medalla de bronce, el que pierde no tiene nada’, matizó.
Por último abogó por la transferencia tecnológica para la producción a alta escala de alimentos, más aún en tiempos de hambruna, agotamiento de tierras y explosión demográfica y como sustento de las inversiones.
‘Inversión con transferencia tecnológica, la mejor inversión es lo que ayuda a transformar a las dos partes, nuestros países requieren inversión, pero también conocimiento y tecnología, esto para garantizar seguridad alimentaria con soberanía’, señaló.
Morales dijo que una visión de las cosas en arreglo a sus postulados comporta el clima de confianza y la seguridad jurídica que líderes de Europa reclamaron en esta junta intercontinental.