Oscar Romano
Luego de los últimos dos golpes suaves recibidos por el gobierno argentino por parte de sectores de la derecha logrando generar salidas “espontaneas” a la calle de la clase media (8N) enojada con Cristina, y un paro con “piquete” (20N) organizado por 3 de las 5 centrales de trabajadores argentinos, nos encontramos con una situación política pre-desestabilizadora potenciada por los medios de comunicación concentrados liderados por el Grupo Clarín, vocero del poder económico que ahora quiere apoderarse del Poder Ejecutivo.
Los hechos de la gendarmería y prefectura, la Fragata Libertad, el corte de energía del 18 de noviembre, el juez Griesa y la amenaza de Default restringido le suma otra cuota de evidente arremetida contra el gobierno argentino a pocos días del 7D, fecha en que debiera cumplirse (por fin) la Ley de medios audiovisuales promulgada hace 3 años por el Congreso, pero aún sin vigenciareal.
Así, los próximos tres años serán una suma de batallas en las que el gobierno y sus aliados políticos parecen haber perdido la orientación y el contacto con la población -que no percibe los otroras beneficios del modelo virtuoso iniciado por Néstor Kirchner en 2003- que está envenenada con la basura mediática vomitada por la TV, radios, TV a cable, internet y medios gráficos privados, quienes se encadenan y marcan la agenda de la realidad mediática todos los días de la semana.
Ni «La Cámpora» junto a “Unidos y Organizados” alcanzan hoy para contrarrestar el avance de la derecha exógena y endógena al kirchnerismo y no es capaz de aglutinar a la inmensidad de agrupaciones, grupos, colectivos, grupúsculos, intelectuales, profesionales o técnicos que apoyan a Cristina, pero que no se sienten representados por estos aliados K, engordados durante años y neutralizados por el propio gobierno a cargos gubernamentales de nula eficacia y eficiencia.
Ante el avance y la amenaza concreta del PJ sciolista se presenta un oscuro e incierto panorama político que sin re-re-elección a la vista, obliga a la población a defenderse de quienes han gobernado al pais en el pasado y que advierte la debilidad y soledad de Cristina rodeada de colaboradores -que han perdido la brújula- haciendo cristinismo adulador y aumentando su patrimonio hasta donde se pueda, traicionando al pueblo y a quienes aún creen en un gobierno nacional y popular.
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