Asunción, noviembre 2 de 2012. – Víctimas de la dictadura de Alfredo Stroesnner (1912-2006) y defensores de los derechos humanos se movilizaron hoy en Paraguay para evitar que sus restos sean repatriados desde Brasil, al cumplirse cien años de su nacimiento.

Bajo la consigna, «No permitamos la Reivindicación del pasado ‘stronista'», los manifestantes repudiaron la iniciativa promovida, principalmente, por el senador del opositor Partido Colorado, Alfredo «Goli» Stroessner, nieto del hombre que gobernó este país con mano dura desde 1954 hasta 1989.

Stroesnner nació en Encarnación (Paraguay) el 3 de noviembre de 1912 y falleció en Brasilia el 16 de agosto de 2006.

«La manifestación no es solo en contra del retorno de los restos, sino contra el plan de reivindicar la política terrorista del tiempo de Stroessner. Eso es lo que hoy repudiamos», dijo a Efe el antiguo dirigente del Partido Comunista Paraguayo Luis Casabianca, quien padeció encarcelamientos y el exilio durante el régimen dictatorial.

«Mucha gente en nuestro país sufrió mucho durante los 35 años de dictadura ‘stronista’, que estuvo al servicio de una minoría privilegiada y al mismo tiempo ante la intervención de potencias extranjeras en el país», aseveró el dirigente.

En víspera del centenario del nacimiento de Stroessner, Casabianca recordó que fue detenido numerosas veces y que muchas veces fue torturado, en algunas ocasiones «casi hasta la muerte».

«En muchas oportunidades me apresaron, claro, por razones políticas, porque era comunista y porque estaba en contra de la dictadura de Stroessner. Se condenada a todos aquellos que pensaban diferente al régimen totalitario», abundó.

Casabianca insistió en que se oponen a la reivindicación de la política y la figura del exdictador, a quien calificó como un «tiranosaurio que sometió al país durante 35 años».

Las víctimas, familiares de desaparecidos y activistas participaron en esta jornada en las tareas de señalización de unas fosas excavadas donde fueron hallados los restos óseos de 13 personas ejecutadas durante la dictadura.

Esa tarea se llevó a cabo en la actual sede de la Agrupación Especializada de la Policía Nacional, en Asunción, un antiguo centro de detención donde se realizan excavaciones forenses desde 2009.

Los convocantes de esa actividad también tienen previsto congregarse esta noche ante el «Museo de las Memorias», una antigua dependencia policial donde, según activistas de derechos humanos, se torturaba a los perseguidos políticos.

Desde ese lugar marcharán unas seis cuadras hasta la explanada del Panteón Nacional de los Héroes, en el centro capitalino, donde también anunciaron que instalarán el sábado la «Expo sobre el ‘stronismo'».

Las protestas y reacciones han cobrado fuerza, luego de que «Goli» Stroessner ratificara hoy que prosiguen los trámites para la repatriación de los restos de su abuelo, aunque descartó que puedan hacerlo para este sábado, como inicialmente lo había previsto su familia.

«Los trámites están avanzados pero todavía no listos. Obviamente para el 3 de noviembre no va a estar aquí presente en cuerpo y en alma también donde debe estar, pero ya dentro de poco estaremos toda la familia Stroessner junta en Paraguay», expresó el senador «colorado» en declaraciones reproducidas por la agencia pública IP Paraguay.

Sobre las protestas, «Goli» opinó que serán «insignificantes» y que no afectarán a la figura del exgobernante, quien, según él, «sigue siendo enormemente popular dentro del pueblo paraguayo».

Casabianca refutó las declaraciones del legislador, a quien consideró como «heredero de la política nefasta del dictador».

«Goli no tiene ninguna representatividad o autoridad moral, por eso dice estas barbaridades», sentenció.

Stroessner asumió la presidencia el 4 de mayo de 1954 y perdió el poder en un golpe de Estado promovido por su consuegro, Andrés Rodríguez, en la madrugada del 2 al 3 de febrero de 1989.

Tras ser derrocado, se exilió en Brasil, donde falleció en agosto de 2006, a los 94 años.

La Comisión de Verdad y la Justicia (CVJ), que se encargó de investigar los crímenes y abusos contra los derechos humanos cometidos durante el mandato de Stroessner, emitió un informe en agosto de 2008 en el que cifró en 425 los ejecutados o desaparecidos, en casi 20.000 los detenidos y en 20.814 los exiliados durante la dictadura.

El movimiento para repatriar los restos del sanguinario dictador ha contado con la anuencia de Federico Franco y su «gobierno» golpista, mano derecha del partido colorado que tanto daño hizo al pueblo de Paraguay.