Radio del Sur
12 de octubre de 2012.- Nicaragua denunció, este jueves, que naves de guerra colombianas interceptaron una embarcación civil de este país, en cumplimiento de investigaciones científicas sobre recursos pesqueros propios en el mar Caribe.
Mediante nota oficial presentada a la prensa nacional y extranjera por César Vegas, director jurídico de la Cancillería, el gobierno del presidente Daniel Ortega rechazó los pronunciamientos de Bogotá sobre supuesta intromisión en aguas colombianas.
Desde el día 9 de octubre, el navío civil nicaragüense Medepesca III realiza tareas investigativas para recabar información con vistas a su presentación en el foro de la Convención Internacional para el Comercio de las Especies en Peligro de Extinción, que tendrá lugar en Panamá en noviembre próximo, señala el texto.
A partir de ayer, 10 de octubre, y durante el día de hoy, dos buques de guerra colombianos, ARC-53 (Antioquia) y ARC-61 (Cartagena) interceptan, en actitud hostil, a la embarcación nicaragüense, advierte la demanda.
Paralelamente un avión RC-130 Hércules de las fuerzas colombianas ejecutó sobrevuelos al Medepesca III, tratando de impedir el desarrollo de las labores de investigación pesquera, previstas hasta el venidero 16 de octubre, alertó Relaciones Exteriores.
El ministerio advirtió que tales actitudes inamistosas violan la soberanía nacional de Nicaragua y violentan los principios de la convivencia internacional, lo que en nada abonan a las relaciones entre países vecinos.
Según recuerda el mensaje, esta república centroamericana siempre ha sido respetuosa del derecho internacional y los mecanismos pacíficos de solución de controversias, incluida la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
El gobierno de Nicaragua, resumió el documento, exige el respeto a las normas del Derecho Internacional que rigen los vínculos entre los Estados y demanda el cese inmediato de las actuales hostilidades.
Este incidente ocurre mientras Colombia y Nicaragua mantienen una disputa judicial por límites marítimos ante la CIJ, en una zona de grandes potenciales en recursos naturales, que Managua considera parte del patrimonio nacional.