Buenos Aires, octubre 25 – Los primeros 285 tripulantes de la Fragata Libertad, retenida en Ghana a partir de la acción de un fondo buitre, llegaron esta madrugada a Ezeiza, a bordo de un vuelo contratado por el Gobierno Nacional.

Los tripulación, compuesta de 24 oficiales, 192 suboficiales y 69 guardiamarinas, entre ellos 15 mujeres, llegó a las 0.50 horas en el vuelo 4140 de Air France a la Terminal B de Ezeiza, donde fueron recibidos por autoridades de la Armada Argentina y más de un centenar de familiares con pancartas de bienvenida.

Entre los repatriados hoy estuvieron incluidos los oficiales extranjeros que fueron invitados por Argentina a participar del viaje de instrucción.

En un clima de emoción, varios de los tripulantes se reencontraron con sus familias en el hall de Ezeiza, mientras que desde la Armada indicaron que una vez finalizados los trámites migratorios y aduaneros, los tripulantes que no fueron esperados por familiares, se dirigieron hacia la Escuela Naval Militar para hospedarse allí.

El capitán de navío Carlos María Allievi, segundo jefe a cargo de la Fragata, expresó a su arribo a Ezeiza que el personal que regresó al país lo hizo con entereza, aplomo y responsabilidad, y destacó que la nave seguirá realizando tareas normales con los 43 tripulantes y el comandante que quedaron a su resguardo en el puerto de Tema.

A la vez, Allievi destacó que se trata de un momento especial que fue asumido por todos con profesionalismo, y destacó: «Desde la retención de la Fragata, hace 22 días, el trabajo se desarrolló de manera normal en cuanto al funcionamiento de la nave y las tareas habituales».

En tanto, se informó que esta mañana se reunirá a todo el personal que regresó de Ghana para realizar la verificación médica reglamentaria e impartirle las directivas pertinentes, surgidas como consecuencia de la reformulación de su Plan de Estudios, para cumplimentar su período de adiestramiento profesional.

La evacuación del personal de la fragata fue decidida el fin de semana por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, y comunicada por el canciller Héctor Timerman.

Por orden de la Presidenta, Timerman además mantuvo reuniones el lunes con las máximas autoridades de las Naciones Unidas a fin de destrabar el conflicto que retiene a la fragata en el puerto ghanés de Tema.

En ese contexto, el ministro de Relaciones Exteriores se reunió con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, quien «aceptó utilizar los buenos oficios de su oficina para hablar con el gobierno de Ghana e intercambiar opiniones sobre cómo resolver el conflicto».

Mientras que 285 marineros fueron evacuados, poco más de 40 permanecen junto con el capitán para garantizar el mantenimiento de la fragata, tal cual decidió la Jefa de Estado.

En ese sentido, Cristina afirmó el lunes que mientras sea Presidenta «se podrán quedar con la Fragata Libertad, pero ningún fondo buitre se va a quedar con la soberanía y la dignidad de este país».

«Lo que hemos vivido en estos días, causa mucho dolor y lo digo como argentina», sostuvo la presidenta al hablar por cadena nacional en el Museo del Bicentenario.

En ese marco, sostuvo que «he visto que algunos, muy poquitos afortunadamente, defendían a fondos buitres que violando todas las reglas del derecho internacional embargaban a nuestra fragata

Libertad en un puerto africano, creyendo que van a presionar o extorsionar al país».

Por otra parte Timerman, además de reunirse con Ban Ki moon en Nueva York, también dialogó el lunes con la consejera Legal de la ONU, Patricia O´Brien, quien expresó que «nunca antes en la historia de la ONU existió un caso en que un barco de guerra haya sido motivo de un embargo».

El único antecedente se registró hace más de 12 años y estuvo relacionado con «un barco ruso que fue embargado en un puerto francés y que finalmente se determinó la liberación del barco y una fuerte multa a la empresa que había pedido el embargo y una exigencia de un pago de reparación a quien era el propietario del barco», explicó el canciller a la prensa tras ser recibido por O´Brien en Nueva York.

Tras el arribo, el personal quedó en uso de franco hasta el día lunes 5 de noviembre, período tras el cual los guardiamarinas «retomarán las actividades que les permitirán alcanzar los objetivos de formación necesarios para su egreso el día 8 de diciembre próximo, como estaba previsto», confirmó la Armada.