La publicación cita a una fuente que estuvo cerca de las discusiones entre ambos países, quien asegura que el ataque puede durar entre dos y 48 horas, con el fin de retrasar por muchos años el programa atómico que el país persa asegura es con fines pacíficos.
El exgobernador de Massachussets ha acusado al jefe de la Casa Blanca de no hacer todo lo que se necesita para proteger los intereses de Tel Aviv.
La revista señala que el golpe tendrá un efecto “transformador”, servirá a los intereses de Estados Unidos en la región, asegurará el control del Golfo Pérsico y garantizará la influencia estadounidense allí durante más de una década.
Una acción de ese tipo no puede ser realizada solo por Israel, pues requiere el empleo de medios que solo dispone el Pentágono, por lo que necesitará la participación de Estados Unidos, agrega Foreign Policy.
Autoridades militares de Washington y Tel Aviv planifican iniciar en los próximos días los ejercicios Austere Challenge 2012 que incluyen la movilización de sistemas anticoheteriles Patriot y armamentos diversos, como una demostración de fuerza en la región.
Estados Unidos y sus aliados han impuesto sanciones económicas a Irán, al que acusan de desarrollar un programa nuclear con objetivos bélicos, pero el gobierno iraní niega esas imputaciones.
La XVI cumbre del Movimiento de Países No Alineados, celebrada en Teherán en agosto pasado, defendió el derecho de los estados a desarrollar, investigar, producir y usar la tecnología nuclear con fines pacíficos.