Las protestas comenzaron el pasado 11 de septiembre y no han cesado desde entonces, caracterizadas por el canto de consignas contra Washington, la quema de banderas norteamericanas y los ataques a las embajadas y sedes diplomáticas estadounidenses.
En el Líbano, el secretario general de Hezbollah, Seyyed Hassan Nasrallah se dirigió a unas 500.000 personas que se dieron cita al sur de Beirut, para protestar contra la película sacrílega.
“Este es el comienzo de un movimiento serio que debe seguir en todo el mundo musulmán en defensa del Profeta de Dios (…) Mientras tengamos vida, no vamos a guardar silencio ante los insultos contra nuestro Profeta Mahoma”, afirmó Nasrallah.
En Kabul, miles de afganos gritaron “¡Muerte a América!” y “Muerte a aquellas personas que han hecho una película que insulta a nuestro Profeta”
“Vamos a defender nuestro Profeta mientras corra sangre a través de nuestros cuerpos. No vamos a dejar que nadie le insulte (…) Los estadounidenses tendrán que pagar su deshonra”, expresó un manifestante a la televisión local.
En Karachi (sur de Pakistán), la policía disparó al aire y utilizo gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes que marchaban hacia el consulado de Estados Unidos.
Además, en Lahore (noreste) miles de paquistaníes se enfrentaron con la policía que protege el consulado norteamericano, mientras gritaban consignas contra Washington y quemaban banderas del país occidental.
En Yakarta, Indonesia, la policía utilizó gases lacrimógenos y cañones de agua para arremeter contra los manifestantes que se congregaron frente a la embajada de EEUU y lanzaban bombas molotov contra las instalaciones diplomáticas.
También en Indonesia, cientos de estudiantes pisotearon banderas de Estados Unidos y lanzaron huevos en el consulado de la ciudad de Medan, capital de la provincia de Sumatra del Norte.
Igualmente, musulmanes en Irán, Turquía, Sudán, Egipto, Yemen, Túnez, Bangladesh, Malasia, India, Iraq, Marruecos, Siria, Kuwait, Nigeria, Kenya, Malí, Nigeria, Australia, Gran Bretaña, Estados Unidos, Francia, Bélgica, y varios otros países; han llevado a cabo numerosas manifestaciones para condenar la película blasfema.
También se registraron protestas este lunes en Cachemira (región ubicada entre la India y Pakistán) y en la Franja de Gaza.