Autor: OSP/ Aporrea

Buenos Aires, 18 de julio de 2012.- Así lo expresó Graciela Adán, Coordinadora de de relaciones Institucionales del Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INPI), al ser entrevistada por el Representante de negocios de la Embajada de Estados Unidos en Argentina.

Adán manifestó de acuerdo a una reunión filtrada por Wikileaks que el gran volumen de solicitudes de patentes abandonadas era por causa de la crisis económica que vive el país afirmando que los solicitantes dejan de pagar las tasas requeridas para el examen de patentes.

 

Representantes de la industria atribuyeron este incremento de abandonos al procedimiento “fast-track” que daban prioridad de análisis a las solicitudes de patentes extranjeras en perjuicio de las nacionales. El backlog o atraso se estimaba en 2008 en 23 – 24000 solicitudes de patentes en trámite.

Según la comunicación enviada por el entonces embajador Wayne, los funcionarios del INPI consideraban que la acumulación de expedientes a un presupuesto ajustado, una migración de los examinadores de patentes farmacéuticos a la actividad privada y largos períodos para entrenar a los nuevos examinadores.

Según Ernesto Felicio, Director ejecutivo de CAEME, cámara de laboratorios extranjeros, los examinadores de patentes eran forzados a no cumplir con la normativa y da el ejemplo de cómo el entonces ministro de salud, Ginés González, fue a conversar con ellos para apelar a su “responsabilidad social” y ayudar a garantizar el acceso de medicamentos (a la población).