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Quito, julio 4 – La Cancillería de Ecuador confirmó su participación en la Reunión Extraordinaria de Ministros de Relaciones Exteriores de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) que se realizará este jueves cinco de julio, para tratar la ruptura del orden democrático y constitucional en Paraguay.

El canciller Ricardo Patiño asistirá al foro regional que tendrá lugar en la ciudad de Santiago, luego que Chile convocara la reunión, en su calidad de presidente pro témpore de la Celac.

El diplomático ecuatoriano declaró recientemente que el golpe de Estado en Paraguay es una alerta para la región, ya que nuevamente se ha visto violentado un proceso democrático legal y legítimo.

Patiño sostiene que en Paraguay se repite la ominosa estrategia aplicada en Honduras en 2009, al ser destituido un presidente elegido democráticamente por el pueblo.

“Sólo que en esta ocasión, para variar un poco el libreto, los militares no allanaron la casa del presidente (Fernando) Lugo y lo expulsaron del país, señaló.

Asimismo, el funcionario considera que aunque el Senado paraguayo utilizó subterfugios para armar un juicio y destituir legalmente al presidente Lugo, “las irregularidades de tal proceso son evidentes”.

Recordó además que ninguna de las acusaciones contra Lugo fue sustentada, ni en fondo ni en forma. “Incluso, en Paraguay no existía un procedimiento parlamentario para enjuiciar políticamente al Presidente”, aseveró.

También cuestionó el hecho de que el Congreso aprobara un reglamento para viabilizar y cerrar el proceso en menos de 24 horas, sin darle el tiempo legal requerido al acusado para que preparara su defensa jurídica.

Tras esta situación, el Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) resolvieron “suspender temporalmente” a Paraguay de ambos organismo, aunque sin imponer sanciones de tipo económicas.

El pasado fin de semana, el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, expresó su insatisfacción por la resolución emitida por la Unasur sobre Paraguay, al considerarla muy débil, ya que, a su juicio, eran necesarias algunas medidas más radicales contra los golpistas.

El pasado jueves 22 de junio la Cámara de Representantes de Paraguay aprobó un juicio político contra el presidente constitucional Fernando Lugo, bajo la acusación de “mal desempeño de sus funciones”.

El Senado tomó una decisión final 24 horas después, violando el debido proceso de Lugo y sin concederle el tiempo legal para preparar su defensa. Por mayoría parlamentaria, Lugo fue destituido de su cargo y en su lugar fue juramentado el hasta entonces vicepresidente, Federico Franco.