
En la actividad reafirman el irrestricto respeto a la soberanía; integridad e inviolabilidad territorial de los Estados; la no injerencia en asuntos internos; la autodeterminación de los pueblos; y el pleno respeto a los Derechos Humanos; para consolidar la visión e integración regional, según el Tratado Constitutivo de Unasur.
Recomiendan al Consejo de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de Unasur, a través del Consejo de Ministras y Ministros de Relaciones Exteriores, la creación de un Consejo con el propósito de fortalecer la cooperación en materia de Seguridad Ciudadana, de Justicia y la coordinación de acciones contra la Delincuencia Organizada Transnacional, y de esta manera evitar la duplicación de funciones con otras instancias existentes en Unasur.
Los delegados proponen la creación de un grupo de trabajo que elabore con el apoyo de la Secretaría General de Unasur el estatuto y el Plan de Acción de dicho Consejo.
El Grupo evaluará la posible coordinación o la integración de esta nueva instancia con el Consejo Suramericano sobre el Problema Mundial de las Drogas (Cspmd). La evaluación, el Estatuto y el Plan de Acción, se elevarán al Consejo de Ministras y Ministros de Relaciones Exteriores de UNASUR, para la aprobación definitiva del Consejo de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno.