Autor: Marcos Alves
Por fin nos sacamos de encima a la transnacional estatal hidrocarburífera REPSOL, un verdadero esperpento de la industria mundial.
Cual bomba succionadora de petróleo, la empresa de capitales transnacionales mayoritariamente no español ha extraído durante casi 20 años el principal recurso energético no renovable con el que se sostiene al actual sistema capitalista que explota a gran parte de la población mundial.
Los planes de golpe de estado, invasiones y asesinatos por petróleo (Irak o Libia, más la amenaza abierta a Irán y la desestabilización permanente de Venezuela), se vieron amenazados por la muestra de poder popular refrendado por los representantes del pueblo argentino a iniciativa del gobierno de Cristina Fernández.
Ahora debemos extraer los recursos energéticos de manera racional para lograr el abastecimiento de gas y petróleo que garantice el desarrollo con inclusión social en curso en territorio argentino: gas y nafta baratos para el pueblo.
La payasada de Brufao, Rajoy y la caterva de medios de comunicación fascistas españoles estarán rumiando su propio bolo alimenticio envenenado mientras continúan explotando a los pueblos de otros países de Latinoamérica o África que ojalá puedan quitarse a estos colonialistas parasitarios de nuestras tierras.
Por eso, contabilicemos muy bien los pasivos ambientales y los incumplimientos contractuales de estos pseudo petroleros vaciadores de empresas: una lacra que no volverá a merodear por estas tierras.
Chau REPSOL , hola YPF