“No queremos un escudo antimisiles. No queremos tropas de la OTAN en Libia o Afganistán. No queremos peligrosas, inútiles e ilegales armas nucleares”, señalaron los integrantes de la organización ‘Acción por la Paz’ en un comunicado.
Unos 15 activistas, que habrían logrado entrar en el recinto con el objetivo de entregar un mensaje claro a los jefes de la OTAN, fueron inmediatamente detenidos junto a otros cientos de simpatizantes que formaban parte de un grupo de unos 500 pacifistas internacionales.
Todos ellos viajaron a Evere desde Alemania, Holanda, Francia, Reino Unido, Finlandia, Suecia, Turquía, Italia, Portugal y España, además del interior Bélgica. Según la Agencia Belga, los detenidos, que suman más de 400 personas, fueron llevados a la Comisaría del municipio de Etterbeek.
La policía les impidió acercarse a la sede de la OTAN, fuertemente custodiada y protegida por vallas, y los activistas tuvieron que conformarse con una zona verde, bautizada por el grupo como “plaza de la libre expresión” y “área de apoyo”, que está situada en frente del recinto.
Helicópteros sobrevolaron la sede de la OTAN y el personal de seguridad de la Alianza también estuvo en alerta máxima, apoyando el dispositivo de la policía belga.