Por otra parte, el predominio tecnológico sobre los países facilita la apropiación de los mercados, es uno de los hechos más característicos en estas últimas décadas. Tecnología indispensable para acumular capitales, los propietarios de la tecnología en base al petróleo aprovecharan los cambios climáticos para anclar sus monopolios con las innovaciones técnicas para potenciar la productividad del trabajo, algo así como las petroquímicas en estos tiempos con más valor que los yacimientos petroleros.
La capacitación profesional del trabajo llego a ser más productiva y mejor explotada que las virtudes sean estas somáticas o éticas de los empresarios privados, pero, al ser anuladas por la superioridad tecnológica las ventajas comparativas entregadas a los inversionistas para un país afectan el sustento para las empresas estatales, así, la supervivencia de un estado capitalista se debilita dando paso a la entrega de la soberanía a monopolios trasnacionales crediticios para el manejo financiero de las regiones desde un país más grande en todos los aspectos.
Ya no es de locos afirmar que el nuevo principio de partición del capital pasa del plano horizontal al vertical porque el petróleo está próximo a dejar de ser fuente de energía insustituible, es la diferencia fundamental que se impone al nuevo capitalismo en el acceso, uso, desarrollo y monopolización de la nueva tecnología, la geografía existente para la repartición de los capitales ya no será solo para el mundo desarrollado sino funcional dentro de las infinitas formulas financieras-tecnológicas que permitirán acumular nuevos capitales conquistando nuevos territorios para un mercado mundial. Los Estados en esta nueva geopolítica en base a una nueva geografía económica, su consistencia será maleable y transitoria diferente a la caracterizada en base a los territorios soberanos que se puedan proclamar.
La pérdida de soberanía económica por parte de Grecia, Portugal, Irlanda, tal vez España e Italia, dos de las economías más grandes imposibles de rescatar no pueden superar sus recesiones sin afectar a sus pueblos, despidos gratuitos, recortes en la salud, educación, incremento de impuestos, este domingo España inicia el mayor ajuste con un incremento del 7% en los consumos domésticos, 5% en el gas, peajes de autopistas 21%, energía eléctrica para industrias y pequeñas empresas 4.1%. Mariano Rajoy debe ahorrar 16.500 millones de euros en este año para tratar de equilibrar los ingresos con los gastos a un costo de unos 600.000 empleos dicen los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO) y Unión General de Trabajadores (UGT) el desempleo en España supera el 22.9% o 5.30 millones de personas sin trabajo de un total de más o menos 25-30 millones de parados en toda Europa, desempleo castiga más a los jóvenes de menos de 25 años considerada ya, la generación perdida.
Este es un ejemplo de cuando la crisis alcanza niveles dramáticos, los gobiernos no disponen de capacidad de gestión y visión por estar comprometidos con una moneda común en una zona euro compleja, lenta, enredada porque depende de la voluntad parlamentaria de 27 países cada vez que una ayuda se tiene que efectivizar y esto es para todos los países europeos; que se puede esperar si las mayores economías de ese continente Alemania y Francia según el FMI, BCE, OMC, crecerán al 0.4 y al 0.3% respectivamente al 1% si acaso, es decir nada para salir del agobio de deuda soberana que compromete a sus PIB en un 80% promedio.
¿Es una estrategia mantener al Banco Central Europeo débil y dependiente del FMI, cuando el sistema tributario y fiscal no es homogéneo y cuando faltan liderazgos creativos que trabajen por la integración? ¿Quién frena el complemento del tratado de Roma que empezó en 1952 para construir un sistema federativo ágil con poderes y recursos? Lo que está ocurriendo en Europa es el núcleo de los problemas mundiales porque ni Ángela Merkel, Nicolás Sarkozy peor David Cameron tienen la capacidad ni la talla de los otrora líderes europeos que marcaron el camino de esa región después de dos guerras mundiales con resoluciones difíciles pero sustentadas en visiones propias de quienes son llamados estadistas.
Merkel y Sarkozy son actores de circo, no ofrecen seguridad a esa monstruosa incertidumbre regada por todo el continente y en parte del mundo, no tienen talento creativo para las soluciones, imponen lo más fácil entregar la soberanía económica a organismos crediticios, no son capaces de tomar decisiones drásticas por falta de apoyo de los otros gobiernos que no ven en ellos liderazgos honestos para continuar con el euro.
Transferir más soberanía de cada país al sistema comunitario significa colocar a Europa por tercera vez en manos de EEUU. La FED estaría gustosa de impulsar masivamente el dólar en la euro zona aprovechando que no existe el convencimiento de concientizar el sistema con el euro para hacerlo eficiente, consistente y representativo para los intereses de esos 17 Estados integrándose, algo que ni las dos guerras mundiales consiguieron.
El descalabro de la política capitalista es el tema recurrente en los sistemas estadounidense y europeo, los temas que se debaten son cada vez más lejanos para la solución de la crisis por la división interna que lleva el proyecto de globalización y monopolio, solo las opciones electorales son intercambiables en un estadio inquietante que da la razón a quienes aseguran el hundimiento del sistema conectado con un hecho cada vez más evidente, la pérdida de soberanía de los Estados, decisiones que antes tomaban los gobiernos, decisiones que daban su contenido a la vida política han pasado a ser decisiones que las toman entidades trasnacionales FMI, BM, OMC, FED todavía son decisiones incompletas pero efectivas para sostener la perdida de soberanía y la crisis con el euro.
Trasnacional difusa responde inmediatamente desde el automatismo de la economía capitalista a una necesidad apremiante desde hace unos 60 años para el interés de un gobierno global con el respaldo de la ONU al servicio de las grandes potencias vencedoras en la segunda guerra mundial, ya no pueden ocultar la ineludible necesidad de un gobierno planetario para salvar al capitalismo.
La crisis actual debe ser vista como el foco central de la crisis del sistema en su conjunto, la división, la superficialidad y mediocridad política, las guerras, el precio del petróleo, el poder de la banca privada se conectan como el efecto a la causa de una vida sometida a las cosas para el soporte de la vida social, mercancías encausadas en la realización del valor económico, cuando no hay demanda el sistema se desploma, requiere la acumulación del capital absoluta, indispensable para salvar al sistema en un solo mercado mundial que no se da porque no funciona coordinadamente por China, encuentro hostil con EEUU, empeñados en procesos de acumulación particulares articulados entre sí solo gracias al enfrentamiento mercantil de todos contra todos para sobrevivir.
En el plano más básico los estados, hasta ahora, son empresas colectivas particulares de acumulación del capital luchando por los primeros lugares en el mercado mundial ya que aglutinan a una considerable masa de patrimonios privados, aprovechan y comparten las ventajas competitivas que les tiene asegurado su dominio sobre una base social productiva, si es competitivo es sustentable cuando la meta del capital es atractiva para los propietarios privados, a su vez, es atractiva gracias a que el conglomerado de capitales exige de los mercados mundiales rentas por la productividad extraordinaria sea territorial por los recursos naturales, poblacional por el mercado y tecnología de punta en términos monopólicos.
La revolución por las energías limpias o nucleares terminara con la división del capital en grandes regiones, EEUU busca unificarlas bajo su dirección.