¡Para enfrentar la crisis capitalista!
Durante 5 días centenares de militantes sociales, entidades e intelectuales se reunieron en Porto Alegre, para llevar a cabo diversos debates y convergencias sobre la crisis capitalista mundial y sus consecuencias en el medio ambiente y en las poblaciones.
El evento realizado entre el 24 y 29 de enero no tuvo el mismo glamour ni la pasividad de otras ocasiones. No era un Foro mundial, era sólo un foro internacional, temático, enfocado en la crisis y el medioambiente. Por eso la participación fue más militante y representativa. Hubo decenas de reuniones, talleres, seminarios y debates, entre las más diferentes redes internacionales y articulaciones sociales. De ahí su importancia, el de continuar siendo un espacio de exposición de ideas, de debates y diálogos entre diferentes entidades y visiones de mundo.
2. La unidad en el análisis de la coyuntura
El resultado de esos diálogos es que se produjo una profunda coincidencia de análisis y evaluaciones, entre los más diferentes movimientos sociales presentes (de Brasil y de América Latina y algunos europeos), intelectuales comprometidos con el pueblo, entidades de la sociedad civil y militantes anónimos, por cierto muy combativos. Todos concordaron que estamos en el inicio de una crisis, prolongada, que es estructural del capitalismo, ahora globalizado, capitaneado por el capital financiero y sus corporaciones transnacionales. Que los estados nacionales y sus gobiernos están a merced de los intereses del gran capital, y de cierta forma con las manos atadas para tomar medidas efectivas que pudieran resolver la crisis, sin afectar a los trabajadores.
Todos concordaron que frente a la crisis, las grandes empresas capitalistas, sus bancos y corporaciones y sus gobiernos nacionales, se mueven y están adoptando las siguientes estrategias:
a) Utilizar los recursos públicos en su provecho y así paliar la crisis;
b) Provocar conflictos bélicos regionales, para generar demandas al complejo industrial-militar;
c) Reprimir posibles movilizaciones populares, como está ocurriendo en todos los países donde hay movilizaciones, inclusive en Estados Unidos y Europa;
d) Apropiarse de los recursos naturales, privatizándolos para las empresas, como forma de transformar el capital ficticio en patrimonio, bienes efectivos, y así en la próxima etapa los transforman en lucros extraordinarios;
e) Transformar los países del hemisferio sur en meros exportadores de materias primas para sus necesidades;
f) Aumentar el desempleo en el hemisferio norte, sobre todo entre jóvenes y los trabajadores de las industrias;
g) Utilizar la conferencia de Río+ 20, como teatro internacional para decir que están interesados en la sustentabilidad y crear un nuevo marco legal, que les dé credibilidad para apropiarse de los recursos naturales, en el contexto de lo que se ha denominado «economía verde», y seguir acumulando ganancias, con colorido verde;
3. Las propuestas unitarias para enfrentar la crisis
Frente a esa situación, se realizó en Porto Alegre, como última actividad del Foro, una importante asamblea internacional de movimientos sociales, que produjo un documento de análisis y selló un acuerdo unitario, entre otras iniciativas, para:
a) Denunciar a los estados y gobiernos que están operando sólo en favor del capital;
b) Denunciar la máscara de economía verde, como un engaño para esconder la verdadera causa de los problemas ambientales que se reproducen en todo el mundo;
c) Tener claro que los principales enemigos del pueblo en esta etapa del capitalismo, son el capital financiero, las empresas transnacionales y los procesos de militarización y represión que ocurren en los países;
d) Luchar por una democracia verdadera, que supere la mera representatividad formal, la manipulación que los capitalistas están operando en relación a los gobiernos y construya nuevas formas de participación popular en los destinos de los países;
e) Esforzarse para realizar grandes movilizaciones de masas en todos los países, contra los enemigos comunes, única forma de poder alterar la actual correlación de fuerzas;
f) Defender los recursos naturales de nuestros países, como la cuestión de la soberanía nacional y popular, frente a la ofensiva y apropiación privada del capital;
g) Exigir de los gobiernos políticas públicas de protección de los intereses de la mayoría de la población, en especial de los más pobres y trabajadores;
h) Realizar esfuerzos para enfrentar el monopolio de los medios de comunicación de masas, que en todos los países manipulan a las masas y distorsionan las verdaderas causas de la crisis y sus graves consecuencias para la humanidad;
i) Redoblar esfuerzos para construir la unidad entre todas las fuerzas sociales en nuestros países y a nivel internacional, única forma de enfrentar la fuerza del capital;
j) Preparar para la semana del 5 junio, una gran jornada mundial, en defensa del medioambiente y contra las empresas transnacionales;
k) Prepararse para realizar entre el 18-26 de junio, en Río de Janeiro, una gran movilización mundial, con un campamento permanente, realizar la cumbre de los pueblos, en contraposición a la cumbre de los gobiernos y del capital.
Como ven, los espacios de Porto Alegre fueron muy fértiles para la construcción de convergencia y unidad de objetivos. Ahora, se espera que todas las fuerzas involucradas en Brasil, en América Latina y en todo el mundo, logren llevar a la práctica estos acuerdos programáticos.
João Pedro Stedile es miembro de la Coordinación Nacional del MST y de la Vía Campesina Brasil