
El portavoz de Twitter también ha matizado que siempre que se elimine un mensaje será por una cuestión «legal»; el bloqueo de un contenido «sólo ocurrirá, como siempre ha ocurrido, como reacción a un proceso legal válido», lo que elimina los argumentos «históricos y culturales» de los que se hablaba en su primer comunicado.
La red social de microblogging ha reiterado su «entusiasmo» por el derecho a la libertad de expresión y ha defendido la «transparencia» con la que se realizará cualquier tipo de bloqueo (aparecerá un mensaje informando de en qué países se ha eliminado una publicación) y el control de usuario, que podrá seleccionar manualmente su localización.
Dentro de Twitter, muchos usuarios se han quejado del comunicado de la compañía y ya se estaban organizando para no usar mañana el servicio a modo de protesta.