Un comunicado difundido hoy por la agrupación política señala que, 30 años después de una guerra corta pero sangrienta, el tema aún es tratado con arrogancia por las autoridades británicas.
El primer ministro David Cameron, dice el texto, tras acusar al gobierno de la presidenta Cristina Fernández de colonialista por el reclamo de soberanía, convocó al Consejo de Seguridad Nacional para asegurar el dispositivo de defensa de sus territorios en el Atlántico sur.
Los gobiernos británicos agrega- sucesivamente han violado el derecho internacional y las resoluciones de la ONU que llaman al diálogo y la negociación para lograr la descolonización de estos territorios.
Esta ocupación es un remanente de una época pasada, que el conjunto de países de América Latina ha rechazado con claridad en sus más recientes cumbres, precisa el documento.
Las Islas Malvinas no deben ser consideradas como territorios de ultramar británicos por los tratados europeos, asegura el Partido Comunista Francés, y llama a Londres a aceptar el diálogo propuesto por Buenos Aires.
El senado argentino aprobó una resolución condenando las declaraciones de Cameron, así como las actividades de exploración y explotación de recursos naturales renovables y no renovables en ese territorio insular, indicó Prensa Latina.