Kaos. Internacional
El reforzamiento de la política de reducción del déficit público como eje conductor de las políticas económicas favorece el estrangulamiento económico y la profundización en las políticas de recortes de derechos laborales y sociales en beneficio de los intereses del gran capital europeo.

Pacto para reforzar la disciplina fiscal en la UE: checos y británicos quedan fuera

Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE han alcanzado este lunes un acuerdo sobre el nuevo Tratado para reforzar la disciplina fiscal en la eurozona, según han confirmado fuentes europeas. La UE acuerda dedicar los fondos disponibles a las pymes y al empleo juvenil.

República Checa se ha sumado a Reino Unido y ha decidido quedarse fuera del pacto, que así cubrirá sólo a 25 Estados miembros, según ha anunciado el primer ministro sueco, Fredrik Reinfeldt.

El compromiso ha sido posible tras el acuerdo alcanzado entre Polonia y Francia para permitir a los países que todavía no han adoptado la moneda única que participen en algunas cumbres del Eurogrupo -que por primera vez se institucionalizan-, tal y como reclamaba el primer ministro polaco, Donald Tusk.

Sanción automática si se supera el 3% de déficit

El Tratado prevé sanciones automáticas para los países que superen el 3% de déficit excesivo y obliga a los Estados de la eurozona a incorporar a sus legislaciones nacionales, preferiblemente a nivel constitucional, una ‘regla de oro’ que limite el déficit al 0,5% del PIB, como ya ha hecho España.

El Tribunal de Justicia de la UE verificará si la transposición es correcta y podrá imponer multas de hasta el 0,1% del PIB a los socios que no apliquen bien la ‘regla de oro’. Los países que no ratifiquen el Tratado no tendrán acceso a ayudas del fondo de rescate.

El nuevo Tratado es una exigencia de Alemania y del Banco Central Europeo (BCE), que alegan que servirá para generar confianza en los mercados y frenar la crisis de deuda. Los países periféricos esperan que el pacto sirva para que el BCE tenga más margen de maniobra para intervenir en los mercados y para que Berlín acepte aumentar la dotación del fondo de rescate permanente, que también ha sido ratificado por los líderes europeos.