
«Estamos saliendo de la historia de simplemente matar vacas en Argentina» para enfocar el «plan de negocios» en la industrialización de carne, explicó Artemio Listoni, presidente de la compañía en Argentina.
Swift pertenece al coloso brasileño JBS que busca centralizar su producción en la elaboración de hamburguesas y salchichas en la sede de Swift en la zona sur de Rosario.
El grupo JBS ya cerró en 2011 la planta de San José, en Entre Ríos, donde trabajaban 200 operarios que fueron reabsorbidos en una empresa del Estado provincial.
El frigorífico bajó las persianas tras la quiebra que pidieron dos abogados que representaban a los ex dueños, el grupo Temux, de los hermanos Juan y Jorge Terrado.
Algunas multinacionales ya se batieron en retirada del negocio como Cargill que se desprendió de Finexor. También hubo grupos de capital nacional que bajaron la persiana a alguna plantas. Es el caso de como Mattievich que cerró dos en las localidades santafecinas de San Martín y Carcarañá. Los expertos prevén otros dos años para que la oferta de ganado se recupere, tras la pérdida de 12 millones de cabezas.