«Nuestra Asociación nace por la necesidad de un grupo de familias de encontrar un tratamiento adecuado para curar a sus hijas de las secuelas que como consecuencia de la vacunación contra el virus del papiloma humano, han sufrido y están sufriendo. La falta de respuesta por parte de las autoridades políticas y sanitarias, demasiado comprometidas con las farmacéuticas, y el intento de las mismas por desvincular la acción de la vacuna de sus efectos, son la evidencia de que desde el primer momento lo que se pretendía era achacar estos efectos a agentes externos que no los comprometieran y de ese modo eximirse de la responsabilidad de haber iniciado una campaña de vacunación masiva sin las suficientes garantías.
El desconocimiento de las autoridades sanitarias del nuevo cuadro clínico que ha aparecido, unido a las presiones que han recibido de las administraciones públicas han hecho que los profesionales claudicaran finalmente y cedieran para convenir un diagnóstico común lo suficientemente amplio como para que tuvieran cabida todos los casos, obviando que lo único en común que tienen nuestras hijas, en tanto no se investigue el porqué les ha pasado a ellas, es haberse vacunado y en esta omisión si que se han comprometido gravemente al anteponer a la salud de las niñas los intereses de quienes les pagan.
El desamparo, la indefensión, el abandono de nuestras hijas a su suerte por quienes tienen la OBLIGACIÓN de velar por ellas, no nos ha dejado otro camino que el de aunar nuestros esfuerzos para exigir desde la Asociación sino su comprensión, si al menos el amparo y la protección al que tienen derecho y que sin duda merecen.
Desde aquí un beso muy fuerte para todas ellas».
Tal y como lo denunciara BWN patagonia , unico medio que alertó sobre la peligrosidad de la vacuna contra el VPH en la Argentina, los efectos adversos de esta vacuna ineficiente y sin razón de ser, y que será administrada a todas las niñas de 11 años en nuestro país, provoca entre otras cosas: Muerte subita, paralisis, Abortos espontanos, abortos inducidos, y todo tipo de percances inimaginables a dias o semanas de haber sido inyectada. Casi los mismos sintomas colaterales que produce otra vacuna inutil contra otra «calamidad» inventada por la prensa: La vacuna contra la gripe porcina, tan denunciada por la periodista cientifica austriaca Jane Burgermeister, y por el director de este diario: Diego Ignacio Mur.
Entre algunos de los testimonios plasmados en la pagina oficial de AAVP, pueden leerse los siguientes:
LEIXURI: No sé muy bien a quien tengo que dirigirme y pedir ayuda así que ahí va: soy una chica de 14 años sin vida propia desde que me pusieron la vacuna del papiloma; esa vacuna que nos han vendido como la panacea del nuevo milenio (como la de la gripe A) pero que nadie hasta hoy se a atrevido a contar el otro lado de la cara de esta vacuna.
Yo sufro contracturas generalizadas, perdida de consciencia,convulsiones, dolores en el pecho, hipoglucemias, espasmos, dolores de cabeza, mareos, vision borrosa… .en fin hay muchos otros síntomas pero si sigo me quedo sin espacio para escribir. No soy la unica dentro del territorio español. Somos de momento 17 reconocidas y seguro que hay mas sin saberlo. Eso de que las niñas de Valencia fue por una partida en mal estado es falso. A mí me han tratado como si esto fuese ansiedad cosa que los psiquiatras han dicho que no es asÍ. En Cruces están cansados de verme, entrar por la puerta, y, depende el medico que esté, me tratan como a una mierda cuando yo soy una persona con derechos, dignidad. Nadie ha sabido curarme hasta que el otro día me digeron que me tenían que haber puesto un tratamiento hace mas de un año. Mis aitas me han hecho pruebas en el extranjero donde me sale un resultado de INTOXICACION POR METALES PESADOS por la vacuna, metales como: mercurio,plomo,zinc,plata y otros igual que a las otras niñas . Estoy en un limbo medico por que no tienen ni idea de lo que me pasa pero los resultados de EE.UU. no tienen validez para ellos, pero quiero recordarles que la vacuna se invento en este pais y que nos llevan años de ventaja. Si a alguien le interesa averiguar algo mas que visite la pagina web aavp alli podran ver informes donde hay muertas y efectos secundarios como los que yo sufro. Debido a todo esto que me ocurre no puedo salir a la calle con mis amigas, no puedo ir al instituto, no tengo vida, siempre acompañada de un adulto, vivo recluida en una caja de cristal veo el exterior y no lo puedo tocar. ¿Tan díficil es que algún médico de esta maravillosa seguridad social que pagamos entre todos me pueda ayudar? ¿No pueden reconocer que se han equivocado y que no tienen ni idea y pedir ayuda a alguien que si sepa lo que me ocurre? Es cierto que somos pocos casos pero por ello ¿no tengo derecho a que me curen ? Soy un ser humano. Si algún periodista con corazón y etica se atreve a contar la verdad que investigue los informes ’VAERS’ y se dara cuenta de toda esta mentira por que la panacea del nuevo milenio no está tan testada como nos han hecho creer y nadie sabe si dentro de unos años servirá para lo que nos la han vendido.
ZURIÑE: Hola: Me llamo Zuriñe y voy a hacer 14 años. Desde los 12 tengo problemas para andar, me vacunaron de un medicamento llamado GARDASIL….
Antes de que me vacunaran yo jugaba a futbol 7 y entré en la selección riojana de futbol aparte hacia atletismo…etc. La primera vez que me pasó yo estaba en el patio del recreo jugando con unas amigas mías, cuando empecé a sentir que las piernas me pesaban, les dije a mis amigas que iba a descansar que estaba muy cansada una de ellas me vio asustada y preocupada, me preguntó que era lo que me pasaba, yo le dije lo que me pasaba, ella me ayudó a levantarme cuando vio que me temblaban las piernas y entonces intente ir adonde estaba el profesorado ella me ayudó a caminar porque me costaba…. Al llegar llamaron a mi madre, mi madre decidió llevarme al hospital, una vez allí me ingresaron las pruebas no decían nada así que dijeron que podía ser psicológico. Mi madre lo negaba pero al final fuimos a la psicóloga. Ella nos dijo que no me pasaba nada psicológico, así que le dimos el informe al médico, ellos no sabían que podía ser, así que me dejaron en estudio por temblores inespecíficos así llevo un año cada vez que voy al hospital los informes son iguales, temblores inespecíficos y me mandan para casa. Mi madre y mi familia ha sido mi único apoyo, un día mi madre compró una revista de médicos donde ponían los mismos síntomas que tenia yo. Se puso en contacto con la asociación de afectado del papiloma humano, y allí conocí a varias niñas que tenían síntomas parecidos. Hace poco me operaron, era mas bien una operación exploratoria, me quitaron la apéndice y hay se vio que tenia la trompa inflamada y un ovario poliquístico me hicieron también pruebas de hormonas y ahora tengo que estar tomando unas pastillas durante 1 año por desajustes hormonales. Yo intento hacer la vida lo más normal que puedo, pero lo que me pasa me influye también en las notas. Yo era una niña de sobresaliente en educación física y ahora tengo un suficiente porque no puedo realizar educación física y me pusieron el suficiente por hacer un trabajo sobre el ciclismo. Si tuviera 88 años entendería lo que me pasa pero tengo 13, y no creo que sea normal tener que estar así. Los médicos no quieren aceptar que es de la vacuna, yo creo que es más importante la salud de las personas a la vergüenza de reconocer que se han equivocado. Todas las niñas necesitamos que nos curen, ¿es que acaso esto no se puede curar? Por favor, quiero volver a jugar al futbol, al baloncesto, seguir teniendo sobresaliente y ser de las mejores de mi clase, ahora mismo no llego ni a coger a mí hermano que tiene 8 años. Ahora sí que se puede decir que necesito un psicologo, estoy triste, lloro cada dos por tres y la verdad es que muchas veces no sé ni porque, mi madre dice que son las hormonas, que me anime, que se me pasara. Gracias por leer esta carta y si alguien nos puede ayudar que se ponga en contacto con la asociación. Desde aquí quiero dar las gracias al único medico que se ha interesado por mí, que de verdad me ha demostrado que le importo tanto yo como su profesión, por atenderme siempre y por escucharme cuando nadie lo ha hecho. Gracias Antonio.
¿Similitudes con Argentina?
Los paises complices de la corrupta Organización de la Salud y la industria farmaceutica coinciden siempre en lo mismo: Gobernantes silenciosos que ocultan información. Y medios de prensa comprados por la mafia.
España: Recientemente el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) ha dado luz verde a la inclusión en el calendario vacunal en España, con cargo al sistema sanitario público, de la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH). Esta decisión se ha tomado a pesar del alto precio de las dosis y de las dudas más que razonables sobre su eventual capacidad y eficiencia para prevenir un número sanitariamente relevante de muertes por cáncer de cérvix en mujeres españolas, comparado con las actuales prácticas preventivas.
Los altísimos costos de la vacunación, atacan a la sostenibilidad financiera no sólo del calendario vacunal español, sino de todo el sistema de servicios de salud pública. Sin embargo, el coste no es el único problema grave: la vacuna del VPH ha sido promocionada ante la opinión pública, los sanitarios y los decisores políticos como una vacuna eficaz en la prevención del cáncer de cuello uterino y el sufrimiento que acarrea en las mujeres, cuando esto no es cierto. Sencillamente, esta evidencia científica aún no existe. Los ensayos sobre la vacuna no han podido ver su efecto en la prevención del cáncer, ya que éste tarda mucho en desarrollarse; además, hay posibilidades reales, comprobadas, de cortar el proceso antes de que el cáncer se desarrolle, tanto mediante la inmunidad natural como con el cribado de lesiones precancerosas y su tratamiento. El ensayo que más tiempo de seguimiento ha tenido hasta ahora ha sido de 6 años (y es un ensayo de fase II) y el ensayo en fase III con mayor seguimiento hasta ahora tiene tan sólo 3 años. Dado que el cáncer que se pretende prevenir tarda 30, 50 o más años en desarrollarse, la brevedad de los ensayos es obvia. Por tanto, hará falta aún bastante tiempo para ver si las personas vacunadas en los ensayos clínicos desarrollan o no menos cánceres que las no vacunadas. En países como España, con una incidencia del problema tan baja, esperar debería ser la conducta lógica.
Ciertamente, con la información disponible es razonable esperar que la vacuna acabe demostrando dentro de años que previene algunos cánceres de cuello uterino. Sin embargo, hay que tener en cuenta los siguientes otros factores: la historia natural de la enfermedad (de evolución lenta), la efectividad de los programas de cribado (alta si el sistema cumple con sus obligaciones), que la vacuna no es efectiva contra todos los serotipos cancerígenos, y que España es un país con baja incidencia de cáncer de cérvix. Por todo ello, es probable que en nuestro país el número de cánceres prevenidos no será muy grande.
También se han planteado objeciones razonables relacionadas con la duración de inmunogenicidad –aún no se sabe si serán necesarias dosis de recuerdo o no–, y sobre el comportamiento de los serotipos no incluidos en la vacuna, que quizás ocupen el nicho ecológico de los ahora incluidos. Hay ejemplos recientes de las consecuencias del uso de la vacuna neumocócica sobre la aparición de serotipos no cubiertos con la vacuna que son multiresistentes a los antibióticos y que causan enfermedad neumocócica invasiva.
Ante esta situación de utilidad aún no demostrada, altos costes para el SNS y prevalencia baja, la decisión más racional sería, y es, esperar a que se acumule más evidencia científica.
¿Cómo podemos explicarnos que el SNS no tome la decisión más racional posible cuando se trata de defender el bien público? Obviamente, la industria farmacéutica y especialmente las compañías promotoras llevan años desarrollando estrategias de cooptación y creación de un clima de opinión favorable, exagerando riesgos con el fin de convencernos, primero, de que existía un problema, y de que luego ellos, precisamente, tenían la solución. Las estrategias de disease mongering –invención o exageración de enfermedades para introducir luego un producto farmacéutico– han sido criticadas duramente y con toda razón desde la deontología publicitaria por el abuso de la buena fe y de la aspiración a no sufrir enfermedades que naturalmente tienen la población y los políticos, a menudo legos en cuestiones sanitarias. El caso que nos ocupa supone la consideración novedosa, muy grave, de que toda infección por VPH es una enfermedad a prevenir, lo que es falso; y además con el énfasis, sin duda interesado, en la –no demostrada– prevención del cáncer de cuello uterino en España.
La industria farmacéutica tiene legítimos intereses financieros, pero no todos ni siempre están en sintonía con las necesidades de salud de la población. El escándalo reciente de la terapia hormonal sustitutoria, y la evidencia de que la industria escondió a la opinión pública durante 30 años graves efectos secundarios del tratamiento de una “enfermedad” previamente inventada, no coloca a este sector en una situación de gran credibilidad pública como garante de nuestra salud.
Por todo lo anterior, los firmantes de este texto pedimos al Ministerio de Sanidad y Consumo y a las Consejerías de salud de las CCAA una moratoria en la aplicación de la vacuna del VPH. Nadie ha justificado que haya prisa para la aplicación de este nuevo programa; por ello, solicitamos abrir un periodo de reflexión, de seguimiento de los efectos de la vacuna en poblaciones reales y de realización de estudios para conocer el coste-efectividad a medida que haya nuevos datos. Todo ello permitirá solventar las dudas razonables que existen sobre la idoneidad de este programa de vacunación para España.