La idea del Global Online Freedom Act (la Ley sobre la Libertad Global en Internet) planteada en el Congreso estadounidense habilita al Departamento de Estado a revisar cada año la lista de países que restringen la libertad en Internet.
De ser aprobada, la ley obstaculizará las exportaciones de programas informáticos y de hardware a los países que se encuentren en su lista negra. También se requerirá una licencia para exportar tales mercancías si el usuario final es el Gobierno.
A su vez Rusia hace un llamamiento para someter la cuestión de la libertad de expresión en la Red a un debate internacional “sin que se tomen medidas unilaterales, sino mancomunando los esfuerzos para elaborar un documento único bajo los auspicios de la ONU”, dijo el diplomático ruso.
Además, Moscú recuerda que ya existe un documento base sobre la cuestión: el Código de Conducta Internacional para la Seguridad de Información planteado por Rusia y otros paises como documento oficial para la última sesión de la Asamblea General.
Cero tecnología para los regímenes represivos
En EE. UU. apuestan por Global Online Freedom Act como un método para proteger a disidentes e impedir la vigilancia y la censura en línea.
«Cada día conocemos sobre nuevas detenciones de activistas democráticos mediante el uso de una gama creciente de herramientas de censura y de vigilancia en internet utilizadas por los gobiernos de China, Bielorrusia, Egipto, Siria y muchos otros países», dijo el congresista Chris Smith, patrocinador del proyecto de ley y presidente de la comisión de la Cámara Baja que supervisa la observancia internacional de los derechos humanos.
El proyecto de ley, presentado ante la comisión el pasado día 8, está pendiente de discusión en la Cámara Baja.