
«No voy a firmar ningún tratado que no cuente con esas salvaguardas, como la importancia del mercado único y de los servicios financieros», declaró Cameron a la BBC.
Según fuentes allegadas al jefe del gobierno británico, Cameron le dijo este lunes a sus ministros que un referendo por una reforma al tratado de la UE dividirá a la coalición gobernante, compuesta por conservadores y liberales democráticos El premier hizo las declaraciones en medio de una rebelión de unos 80 parlamentarios conservadores euroescépticos, que le exigen negociar la devolución de poderes de Bruselas a Londres en la reunión europea de esta semana.
Este miércoles el gobierno británico informó que el Parlamento de Gran Bretaña tendrá poder de voto ante cualquier nuevo tratado vinculado a la UE.
El portavoz oficial de Cameron indicó que cualquier tratado firmado por el gobierno británico sobre la UE «tendrá que pasar por el Parlamento», aunque no detalló si esto requerirá nueva legislación.
Los gobernantes europeos discutirán esta semana en Bruselas un plan propuesto por Alemania y Francia para un nuevo tratado de la UE que lidie con la profunda crisis de deuda soberana de la zona euro.
Tanto el mandatario francés Nicolas Sarkozy, como su colega alemana, Angela Merkel, que detallaron este lunes en París los planes de la reforma, esperan que el Tratado de Lisboa sea revisado por los 27 miembros de la UE.
Por su parte, el ministro de Justicia británico, el conservador Kenneth Clarke, advirtió a los diputados conservadores euroescépticos no esperar que Bruselas devuelva poderes a Londres durante la cumbre de esta semana.
Dijo además que Cameron se enfocará en resolver la crisis de deuda de la eurozona, y agregó que pedirle que discuta sobre «estructuras amplias» dentro de la UE sería «una distracción».