Francisco Sierra Corrales
En la reunión de la CELAC que se está realizando en estos momentos en Caracas, y concluye hoy sábado 3 de diciembre, tras bastidores, otra vez están cayéndose a cuchillo James Monroe y Simón Bolívar; el primero por colonizar y subyugar a Ibero-América y el Caribe y el segundo por ser de Nuestramérica una nación grande, prospera y portentosa.
Ahora la pregunta de las 35.000 lochas, es la siguiente; porque si la correlación de fuerza favorece al proyecto bolivariano, en el sentido de salir del tutelaje de Washington (Que no es lo mismo que ser revolucionario o convertirse en socialista), inclusive de separarse de la OEA, o hacer que esta pase a un segundo plano y abogar por nuestro desarrollo económico autónomo o endógeno y jugar en un mismo equipo en el concierto mundial de naciones, en donde están en esa tónica Brasil, Argentina, Uruguay, Bolivia, Perú, Venezuela, Ecuador, Cuba, Guyana, el Caribe (Con sus diferencias pero tienen una sola voz en ese aspecto), El Salvador y Nicaragua y en contra, a favor del tutelaje de Washington o con James Monroe, están Chile, Colombia, Panamá, Costa Rica, Guatemala, Honduras y México, todos con “alquitas” firmados con USA, que son las minorías tanto en número de naciones como en población, si tomamos en cuenta los habitantes de los países que están, o son afines, al proyecto bolivariano de autonomía, soberanía, independencia, bloque propio y desarrollo económico endógeno, en contra del bloque minoritario Monroista o pro-yanqui, en donde los más grandes son México, Colombia y Chile, quienes con Brasil y Argentina, y Venezuela de ñapa, son suficientes para contrarrestarlos, entonces, porque, por fin Bolívar, no termina de derrotar a Monroe y en vez de ser una reunión meramente “fundacional” (Para firmar una carta de intención, una fotografía y un brindis), se constituye como un ente multilateral definitivo y se crea una comisión de derechos humanos que reemplace a la tendenciosa y politizada comisión de derechos humanos Washingtoniana de la OEA, y se forman otros organismo, tales como los económicos y financieros que reemplacen o empiecen paulatinamente a reemplazar a los de la OEA, por qué tanta concesiones a los gobiernos de derecha continental, que inclusive, a partir de hoy, el pinochetista Piñera de Chile, pasa a ser presidente temporal de la CELAC.
VENEZUELA, EN CONCRETO CHAVEZ, ESTA JUGANDO AL “CENTRO” Y ESO ES LO QUE HA PERJUDICADO
Las posiciones Monroista y la Bolivariana, las pudimos ver anoche, en Caracas, por Monroe, en las bocas de Calderón de México y Santos de Colombia, en donde, el primero nombró un rosario de cosas que justificaban la unidad (¿Unión para qué?, preguntaba el espurio), todas de mero contenido tecnocrático, sin ir al fondo del problema cuya causa de la pobreza, la desigualdad y la desunión, es precisamente el accionar imperialista yanqui; pero por el Monroísmo, más claro fue el Santos de Colombia, quien haciéndose el “yo no fui”, dijo que la CELAC, no era un organismo en contra de nadie, sino en contra de la pobreza, la desigualdad, etc. (Todos estas taras ocasionadas por el neocolonialismo gringo), he ahí la posición Monroista de falsa unidad.
La posición Bolivariana la pudimos notar en la Propia Dilma de Brasil que abogo por un desarrollo autónomo y la conformación de un bloque propio, por supuesto, no hace falta decirlo, ese bloque propio no puede ser de otra forma sino contra Washington y en la posición, en parte de Raúl Castro de Cuba, quien abogó por la eliminación de todas las bases yanquis en nuestro continente, pero el más claro de todos los bolivarianos fue Rafael Correa de Ecuador, quien propone que CELAC sustituya a la OEA y se cree ya un organismo que reemplace a la politizada y yanquizada comisión de derechos humanos de la OEA; eso se hubiese podido lograr, en esta reunión fundacional de Caracas, si Chavez por Venezuela no estuviera jugando tanto al centro político, una especie de ni-ni, ni con Bolívar ni con Monroe, aunque en retorica, el mismo Bolívar queda chiquito.
Si los Monroistas hubiesen abandonado la reunión de Caracas de todas maneras con ellos solo y Canadá y USA, la OEA hubiese quedado liquidada y en franca minoría, y muchos de ellos como Chile y México, más temprano que tarde tendrán gobiernos de signo pro-bolivariano.