Chomsky destacó un ejemplo en 2006 cuando el New York Times informó erróneamente que, durante un discurso ante las Naciones Unidas, el Presidente Chávez había expresado su lamento de no haber conocido a Chomsky antes de su muerte reseñó la Embajada de Venezuela en Londres.
El Presidente Chávez se refería a John Kenneth Galbraith, el economista de Harvard quien había muerto el año anterior, no al Profesor Chomsky. Sin embargo, el New York Times publicó el articulo sin haber comprobado que la interpretación simultánea del castellano al inglés era correcta. A pesar de recibir emails y cartas de reclamación inmediatamente después de la publicación del artículo, el New York Times tardó casi tres semanas en publicar una disculpa, pero el daño ya estaba hecho.
El intelectual también enfrentó la falsa acusación de que no hay libertad de los medios en Venezuela: «El canal de televisión RCTV estuvo muy involucrado en el Golpe de Estado que quitó a Chávez del poder brevemente. Cuando se tuvo que renovar la licencia del canal cinco años más tarde en 2007, el Gobierno decidió no renovarla. Si esto hubiese ocurrido en los EEUU o el Reino Unido, si la BBC o CNN hubiesen estado involucrados en un Golpe de Estado les hubiesen cerrado inmediatamente, no cinco años más tarde».