
En una entrevista concedida a la cadena BBC en lengua persa y a Voice of America, Clinton explicó que esta “embajada virtual”, que estará operativa hacia finales de este año, permitirá entablar una relación entre Estados Unidos y el pueblo de Irán, “especialmente su juventud”.
La jefa de la diplomacia estadounidense subrayó luego que su país “ayuda a los iraníes a burlar la censura mediática impuesta por el Gobierno de Mahmud Ahmadineyad mediante la transferencia de tecnología y formación para su uso”.
Acto seguido, cargó contra el gobierno iraní, en el que -según dijo- sigue habiendo una “tendencia alarmante” y “esfuerzos encubiertos” para construir un programa de armas nucleares”, así como “muchas mentiras a la Agencia Internacional de la Energía Atómica y al resto de la comunidad internacional”.
Luego se refirió al “agresivo” comportamiento de la República Islámica hacia sus vecinos regionales, en el que se evidencian “esfuerzos para tratar de secuestrar y socavar el levantamiento de la Primavera Árabe”.
Luego de la catarata de críticas, Clinton aclaró que “Estados Unidos no quiere un conflicto con Irán”, y sólo busca que se produzca un cambio en su comportamiento.
“Estaríamos encantados si el régimen iraní decidiera cambiar mañana su mentalidad”, subrayó.
