
27 oct. 2011 – La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, negó hoy que los esfuerzos de apertura de su gobierno hacia Cuba escondan una mayor tolerancia hacia el régimen instaurado por Fidel Castro y dirigido ahora por su hermano Raúl.
«Nuestra posición ha sido la misma durante más de cincuenta años. Creemos que Fidel Castro debe irse», señaló Clinton en una audiencia ante el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes.
Clinton respondió así a la afirmación de la presidenta del comité, la republicana de origen cubano Ileana Ros-Lehtinen, de que Washington mantiene un «doble rasero» en su política hacia Cuba, ya que no le aplica el mismo mensaje que, por ejemplo, envió a Muamar al Gadafi al declarar que debía abandonar el poder en Libia.
La secretaria de Estado rechazó que exista, en efecto, un doble rasero, pero reconoció que sí hay un «necesario doble enfoque», que se traduce en la asistencia humanitaria y en medidas como la relajación de las restricciones de viaje y de envío de remesas.
«Queremos democracia para Cuba, pero también queremos llevar ayuda a la gente que pide cambio», indicó.
