Lautaro M. Taibo

Palabras más, palabras menos, esa fue la pregunta que realicé en el ciclo de charlas denominado “Artillería del Pensamiento Vs. Fábrica de mentiras” el día 7 de Septiembre -en el cual nos acompañaron los reporteros de TeleSur que transmitieron la verdad sobre la masacre del pueblo libio por parte de la OTAN. La respuesta a esa pregunta es fundamental para poder comenzar a recorrer un camino hacia la conformación de medios de comunicación y comunicadores capaces de derribar de modo rápido y veloz la maquinaria creadora de mentiras mediáticas del imperio.

La Guerra de cuarta generación que se evidencia contra Siria y Libia se pudo observar previamente en Irak y Alfanistán cuando se hablaba de la existencia de grupos terroristas y de armas biológicas que nunca aparecieron. También se pueden encontrar diariamente casos de manipulación mediática que se ejerce desde la CNN, Fox y otras cadenas de noticias de Estados Unidos para deslegitimar y “sumar voces” contra los países que integran la ALBA-TCP tildando a sus líderes de dictadores, idiotas, y/o populistas.

Sin embargo, frente a esta acción ofensiva se pueden nombrar reacciones defensivas como por ejemplo las de TeleSur en la cobertura de la invasión de Libia. Esta agencia se constituyó en un actor trascendental ya que puso en evidencia las mentiras de los medios de los imperios destruyendo en gran medida la credibilidad de las “grandes cadenas internacionales”. Este papel de la agencia del sur, sin embargo, no alcanza aún para contrarrestar por sí sola la cantidad de falacias que genera minuto a minuto la OTAN y sus medios de comunicación con la finalidad de crear conmoción, pavor, desesperación e incertidumbre en los pueblos del mundo.

Rodolfo Walsh, uno de los más grandes comunicadores de la historia y mártir de la oposición al último golpe militar en Argentina creó, en plena dictadura militar, una Agencia Nacional Clandestina (ANCLA). La Agencia tenía como finalidad transmitir aquello que los medios de comunicación dictatoriales -y proimperialistas- ocultaban. Seis u ocho personas en una habitación con el apoyo de una red popular importante, eran capaces de transmitir noticias fundamentales para que el mundo conociera, por ejemplo, de las desapariciones forzosas y torturas que se practicaban en el país contra jóvenes, mujeres (en varios casos embarazadas), ancianos y hombres.

En el caso de Libia, la población se organizó en menor medida, para realizar videos caseros que la mayoría pudimos ver en programas como Dossier de Walter Martínez. Esas iniciativas son las que nos deberían marcar el rumbo que debemos tomar para poder fortalecer las redes comunicacionales en aspectos novedosos y que implican una mayor preparación por parte de las bases. Saber cómo organizar una red mediática autónoma (y llevar ese conocimiento a la práctica) es central para defender nuestra patria grande. Estar preparados para cuando la ofensiva militar imperialista comience a bombardear países Latinoamericanos es central. TeleSur, el ALBA-TCP, y América Latina en su conjunto necesita indefectiblemente el apoyo del pueblo organizado para salir victorioso de la ofensiva militar que próximamente ejecutará el gobierno de EEUU en nuestra región.
VIVIREMOS Y VENCEREMOS

Fundador de “JÓVENES POR EL ALBA”