“Hay cosas que simplemente no tienen sentido, ya que contradicen lo que la Casa Blanca originalmente nos dijo acerca del ataque. Casi nada sobre esta llamada historia oficial realmente tiene algún sentido”, dijo Russ Baker, un galardonado periodista de investigación y fundador de WhoWhatWhy.com el domingo.
El artículo escrito por Nicholas Schmidle titulado “Conseguir a Bin Laden: ¿Qué pasó esa noche en Abbottabad?”, fue publicado el 8 de agosto.
Baker expresó que el artículo da la impresión que todos los detalles de lo que aconteció fueron suministrados por los soldados y los Navy Seals que condujeron el ataque, mientras al autor no se le permitió siquiera hablar con algunas de las personas que estaban realmente en el evento.
El periodista de investigación arroja serias dudas sobre la historia de la revista estadounidense, afirmando que parece como si un oficial de la administración Obama le dio los detalles a The New Yorker mientras trata de crear la impresión de que esto era información real de la escena.
La historia oficial del asesinato de Bin Laden causada por un equipo comando de EE. UU. ha sido seriamente refutada por muchos expertos y oficiales.
Pocos días después del supuesto incidente, el ministro de Inteligencia iraní Heidar Moslehi señaló la “información precisa” disponible que mostró que Bin Laden murió hace algún tiempo.
Si el ejército y el aparato de inteligencia estadounidense han arrestado realmente o asesinado a Bin Laden, ¿por qué ellos no lo muestran (su cadáver)? ¿Por qué ellos tiraron su cadáver en el mar? Preguntó Moslehi.
Por otro lado, en abril 2002, el Dr Steve R. Pieczenik afirmó en una entrevista que Bin Laden ya estaba “muerto desde hace meses”, y que el gobierno estaba esperando el momento políticamente más oportuno para lanzar su cadáver. Pieczenik estaría en una posición para saber, pues conoció personalmente a Bin Laden y trabajó con él durante la guerra de poder en contra de los soviéticos en Afganistán en la década de los 80.
Pieczenik dijo que Osama Bin Laden murió en 2001, “No porque fuerzas especiales lo hayan asesinado, pero porque como médico que soy, tenía conocimiento que los doctores de la CIA lo trataron y estaba en la lista de inteligencia que él tenía el síndrome de Marfan”, añadiendo que el gobierno de EE.UU. sabía que Bin Laden estaba muerto antes que ellos invadieron a Afganistán.
Analistas también han planteado serias dudas como el por qué oficiales de EE. UU. no permitieron la aplicación de un examen de ADN para oficialmente confirmar la identidad del cadáver antes de su apresurada sepultura.
*Traducción: Ivana Cardinale