TeleSUR

Comenzó este jueves en París, capital francesa, al reunión del Grupo de Contacto de Amigos de Libia, para definir el futuro que debe seguir el país norteafricano sin la presencia del líder Muammar Al Gaddafi. Por su parte, Sudáfrica anunció que no participará en la cita ante su desacuerdo con la intervención militar de las fuerzas occidentales.

El presidente sudafricano Jacob Zuma, comentó que “estamos descontentos” con la forma en que la resolución 1973 de la Naciones Unidas fue interpretada para llevar a cabo los bombardeos aéreos en Libia” encabezados por la Organización Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Durante una visita oficial a Noruega, Zuma observó que los asuntos sobre la reconstrucción de Libia debe hacerse en el marco de la ONU y la Unión Africana (UA), y no con el amparo de la OTAN o de algunos de sus miembros que contribuyeron a la matanza de miles de personas en territorio libio.

“En lugar de confiar las riendas del asunto a la ONU, o incluso a la OTAN, hubo países y gente que tomaron el control. Ello contribuyó a marginalizar a la gente verdaderamente importante”, comentó el mandatario.

“Ese proceso no puede ser quitado a la ONU. Se trata de un proceso de la ONU y es la ONU quien debe dirigirlo. Y es a la ONU que hay que respaldar, así como a la Unión Africana, de la cual Libia es miembro” reiteró.

Sudáfrica respaldó con su voto en marzo pasado la resolución 1973 de Naciones Unidas, sin embargo, expresó que “su implementación traicionó el espíritu del texto” en vista de que la OTAN amparado en el principio de supuesta defensa a los civiles, masacró miles de inocentes en busca del líder libio.

“En lugar de proteger a los civiles los bombardearon” con la intervención aérea, mientras que esa acción “permitía al otro grupo (rebeldes) seguir avanzando” en busca de la toma de Trípoli, capital de Libia.

“Si había que recurrir a la acción militar, debería haber sido para ayudar a las poblaciones” civiles víctimas del conflicto, agregó el mandatario.

Doce jefes de Estado, 17 jefes de Gobierno, una veintena de ministros y altos representantes de ocho organizaciones internacionales, entre éstas la ONU y la Liga Arabe, participan en el cónclave en presencia de los máximos responsables del Consejo Nacional de Transición (CNT), órgano político de los comandos armados libios, mientras Gaddafi llamó este jueves al pueblo libio a resistir ante el ataque de las fuerzas imperialistas.

Argelia reconoce al CNT

El Gobierno de Argelia manifestó su disposición a reconocer al Consejo Nacional de Transición (CNT, órgano político de los rebeldes), luego de que la semana pasada aceptara dar asilo a la esposa del líder Muammar Al Gaddafi y varios de sus hijos.

“Argelia no tomará partido a favor de Gaddafi”, dijo en París el canciller argelino Murad Medelci Meldeci, previo al inicio de la Conferencia y recordó su negativa a otorgar un espacio en su territorio para que el coronel libio pueda asilarse.

“Jamás consideramos la hipótesis de que Gadafi pueda venir a golpear a nuestra puerta”, aseguró el argelino.

El miércoles, China y Rusia, países que se abstuvieron en marzo pasado de votar por la resolución 1973 de Naciones Unidas con la que se abrió paso a la intervención militar en Libia bajo mando de la OTAN, confirmaron su participación en la cumbre de París.

Pekín, que estará representada en París por su viceministro de Relaciones Exteriores, Zhai Jun, reconoció al CNT al destacar su “papel considerable” en la reconstrucción de Libia aunque sin llegar a reconocerlo oficialmente como único representante legítimo.

Por su parte, “Rusia reconoce el CNT como autoridad en el poder y saluda su programa de reformas que prevé la adopción de una nueva Constitución, la organización de elecciones y la formación de un gobierno”, anunció la cancillería rusa.

La cumbre está presidida por el jefe de Estado francés, Nicolas Sarkozy, quien fue uno de los principales promotores de los bombardeos de la OTAN contra la nación norafricana.

“Vamos a dar vuelta la página de la dictadura y de los combates y abrir una nueva era de cooperación con Libia”, dijo Sarkozy en vísperas de la Conferencia que comenzará a las 17H30 locales (15H30 GMT) en el Elíseo, sede del Ejecutivo.

Participarán también el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, su par de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, los ministros de Relaciones Exteriores de Francia, Alain Juppe, de Estados Unidos, Hillary Clinton y de Turquía, Ahmet Davutoglu, estarán en la reunión que cerrará una rueda de prensa entre Sarkozy y Cameron .

El CNT, reconocido por más de 50 países como único representante legítimo del pueblo libio, estará representado en París por su presidente Mustafa Abdeljalil y por su número dos, Mahmud Jibril que presentarán una “hoja de ruta” sobre la transición a la democracia.

También prevén reclamar a la comuidad internacional el desbloqueo de los activos de la administración de Gaddafi en bancos extranjeros estimados en 50 mil millones de dólares y congelados por resoluciones de la ONU.